España ha registrado 864 nuevas muertes por coronavirus el miércoles, una vez más la jornada más mortal desde que comenzó la crisis. El número de casos confirmados superó los 100.000.
La cifra total de fallecimientos aumentó a 9.053 en las últimas 24 horas, desde los 8.189 el martes, según datos del Ministerio de Salud. El número de casos confirmados aumentó a 102.136, aunque el incremento de 7.710 fue inferior a los 9.222 del martes.
España lleva en un confinamiento casi total desde el 14 de marzo, y no queda claro si las restricciones a la vida pública han contribuido a controlar la enfermedad. Las autoridades sanitarias han dicho que la propagación del virus podría estar entrando en una fase de estabilización.
La gestión de la crisis por parte del Gobierno se enfrenta a crecientes críticas tanto de los líderes de la oposición como de partidos que previamente respaldaban al presidente Pedro Sánchez. Los detractores dicen que las autoridades tardaron demasiado en reaccionar, no consultaron lo suficiente con personas ajenas a la Administración y no fueron lo suficientemente enérgicas en la lucha contra el virus.
El Gobierno argumenta que siguió las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y de sus propios expertos. Un estudio publicado el 30 de marzo por académicos del Imperial College, de Londres, estima que las medidas españolas podrían haber evitado 16.000 muertes.