Los beneficios de un cóctel de medidas de estímulo de la Reserva Federal, incluida la flexibilización cuantitativa ilimitada anunciada el lunes, podrían extenderse a los activos riesgosos del mundo en desarrollo, según inversionistas.
Las autoridades de las naciones avanzadas y de los mercados emergentes ya han reducido las tasas de interés y han utilizado medidas fiscales para evitar las sombrías expectativas de crecimiento generadas por el COVID-19. Los funcionarios no solo deberían contener el virus, sino también adoptar más estímulos monetarios y fiscales, dijo Malcolm Dorson, gerente de cartera de Mirae Asset Global Investments en Nueva York, que ha superado al 95% de sus pares este año.
"La estabilidad del mercado desarrollado debería actuar como el principal catalizador para una recuperación de los mercados emergentes", dijo en una entrevista. "Avanzamos en la dirección correcta, pero aún tenemos mucho camino por recorrer".
Las acciones de los mercados emergentes han caído aproximadamente un 30% en lo que va del año hasta el nivel más bajo desde 2016, según un indicador de MSCI Inc. Las caídas del peso de México, el rublo de Rusia y el real de Brasil lideraron las pérdidas monetarias en el mismo período, enviando el indicador de referencia a la baja en casi 7%. La liquidez sigue siendo un problema en los mercados financieros, mientras una liquidación global se extiende hacia otra semana.
"La medida de la Fed ayudará a los mercados emergentes principalmente al garantizar que la fontanería básica del sistema financiero mundial siga siendo operativa", dijo Jens Nystedt, gerente sénior de cartera de Emso Asset Management en Nueva York. "La capacidad de la Fed de usar su balance para adquirir bonos corporativos debería ayudar a reducir las ventas forzadas, lo que tendrá un efecto positivo en los activos de los mercados emergentes a pesar de que esa no es la intención".
La medida de la Fed también dará a los responsables de política monetaria de los mercados emergentes un impulso para adoptar medidas más proactivas para apuntalar sus propias economías, dijo.
A medida que las naciones de mercados emergentes coquetean con tasas reales negativas, algunos bancos centrales comienzan a adoptar medidas menos ortodoxas. El banco central de Brasil tomó el mismo camino que la Fed y anunció el lunes medidas de liquidez que liberan un total de 1,2 billones de reales (US$235.000 millones).
Con el tiempo, los activos de los mercados emergentes también pueden beneficiarse de las tendencias inflacionarias del programa de flexibilización cuantitativa de la Fed, que eventualmente podría traducirse en un dólar más débil, dijo Dorson de Mirae.
"Desde una perspectiva de asignación de activos a largo plazo, uno quiere combatir la inflación y preservar el capital, por lo que los inversionistas a largo plazo deberían buscar mercados emergentes y bienes raíces para hacerlo", dijo.
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