La Unión Europea parece haber obtenido un alto el fuego en la guerra comercial con Estados Unidos por un precio pequeño, al menos a corto plazo.
A cambio de una promesa del presidente de EE.UU., Donald Trump, de retirar la amenaza de un arancel adicional para los automóviles europeos, la UE reformuló propuestas para reforzar los lazos económicos transatlánticos y se comprometió a comprar más soja estadounidense.
El principal interrogante es la viabilidad para la UE de la parte restante del paquete: el objetivo de importar más gas natural licuado de EE.UU. Esto tiene consecuencias estratégicas para el bloque en general y para Alemania en particular, ya que Europa busca depender menos del gas natural ruso.
"No creemos que esto se materialice de manera significativa", dijo Johana Typoltova, analista de gas europeo de Bloomberg New Energy Finance en Londres. "No es necesario construir más terminales de GNL en Europa. Las instalaciones europeas de importación de GNL están subutilizadas, especialmente en el noroeste de Europa".
Condiciones
Este jueves, el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, trató de circunscribir la oferta europea y señaló que espera más concesiones de EE.UU.
"La agricultura debe permanecer fuera del campo de estas discusiones", dijo Le Maire en un comunicado. "Las barreras agrícolas no arancelarias no son negociables. Tenemos estrictas normas de salud, alimentación y medio ambiente y reglas de producción a las que estamos apegados".
Como principal exportadora de automóviles de Europa, Alemania sería la más afectada por cualquier nuevo gravamen impuesto por Trump a los autos importados, en base al mismo argumento de seguridad nacional que ha utilizado para aplicar los aranceles estadounidenses al acero y el aluminio extranjeros.
Suministros de gas
Desde que EE.UU. comenzó a exportar gas de shale desde la costa estadounidense del Golfo de México en 2016, solo 29 cargamentos han llegado a la UE. Eso se compara con los 373 buques cisterna que partieron de la terminal Sabine Pass de Cheniere Energy Inc. en Luisiana, la mayoría de los cuales se destinaron a mercados de Asia, que pagan más.
Nada indica que esta situación vaya a cambiar pronto. La empresa rusa Gazprom PJSC, que suministra más de un tercio del gas natural de Europa a través de gasoductos desde vastos y baratos yacimientos siberianos, ha dicho repetidamente que los suministros de EE.UU. serán simplemente "gotas".
Los cambios en el comercio mundial de soja provocados por las represalias de China contra los aranceles de Trump podrían jugar el papel más importante. La reciente decisión de Pekín de aplicar un arancel del 25 por ciento a la soja estadounidense estaba remodelando el mercado global incluso antes de la reunión entre Trump y Juncker, un luxemburgués que encabeza la rama ejecutiva de la UE.
Finalmente, Trump llegó a un acuerdo con la UE cuyos principales elementos había rechazado en los últimos cuatro meses y cuyo nuevo componente incluye la soja.