Pasar un porro está cada vez más pasado de moda. Pax Labs Inc., una startup con sede en San Francisco que fabrica vaporizadores de marihuana, recaudó US$20 millones en su última ronda de financiamiento, según el máximo ejecutivo de Pax, Bharat Vasan.
Pax, que forma parte de la creciente ola de compañías de dispositivos de marihuana, fabrica vaporizadores conectados a internet que permiten a los usuarios controlar cuán drogados quedan cuando consumen la droga. Los elegantes dispositivos de la compañía parecen lápices destacadores o dispositivos USB y se operan a través de una aplicación. Los vapers pueden configurarse a través de la aplicación para inflar una columna de humo más gruesa, o bajar la luz LED del dispositivo para que sea más discreta al inhalar en público.
El producto puede sonar familiar para cualquiera que conozca Juul, la extremadamente popular y controvertida compañía de “vapers” de nicotina valorada recientemente en US$15.000 millones. No es una coincidencia. Los creadores de Juul, James Monsees y Adam Bowen, también crearon Pax. El año pasado, las dos compañías se dividieron en entidades separadas, Juul Labs Inc. y Pax.
Los dispositivos Pax no están precargados con cogollos de marihuana o cápsulas que contienen aceites con infusión de marihuana. La startup vende las cápsulas vacías a otras compañías, que las cargan y venden a los consumidores a través de máquinas dispensadoras en estados como Colorado, California y Oregon, donde el uso recreativo de la marihuana es legal. El modelo es similar a la forma en que Keurig Dr Pepper Inc. vende una máquina patentada que elabora café a partir de capsulas que son llenadas por productores de café.
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— PAX (@madebyPAX) June 19, 2018
En el último año, las compañías relacionadas con el cannabis han visto cómo se han disparado sus valoraciones en medio de un frenesí de los inversores ante la legalización de la marihuana recreativa en Canadá. Las acciones de empresas de cannabis que cotizan en bolsa, como Canopy Growth Corp. y Aurora Cannabis Inc., han superado al oro y al mercado en general. Tilray Inc., una compañía de cannabis que fue respaldada por el fondo del inversor multimillonario Peter Thiel, ahora tiene una capitalización de mercado de alrededor de US$14.000 millones, valor similar al del laboratorio de pruebas de medicamentos Quest Diagnostics Inc.
A pesar del gran interés de los inversores, Vasan dijo que la compañía solo tomó una inversión de US$20 millones de los accionistas existentes para evitar renunciar a una participación sustancial y volverse excesivamente dependiente del capital de riesgo. "Esta es una ronda deliberadamente pequeña", dijo. Los inversores de Pax incluyen a Tiger Global Management, Fidelity Investments y Tao Capital Partners.
Pax Labs nació de la empresa de tecnología de vaporizadores Ploom, que fue lanzada en 2007 por Monsees y Bowen, dos estudiantes de Stanford. En 2012, Ploom vendió su primer vaporizador, el Pax, diseñado para cocer al vapor brotes de marihuana de hojas sueltas. En 2015, Monsees y Bowen lanzaron un dispositivo altamente adictivo de nicotina llamado Juul, que se convirtió en una sensación entre los adolescentes y rápidamente provocó la ira de los padres y los reguladores de todo el mundo.
En 2017, Monsees y Bowen dividieron a Ploom en distintas compañías. Ambos trabajan en Juul, y no tienen un cargo ejecutivo formal en Pax. Vasan dice que Pax y Juul decidieron separarse después de que quedó claro que ambas compañías enfrentaban distintos desafíos regulatorios. En abril, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. dijo que comenzaría a investigar si Juul comercializaba sus cápsulas altamente adictivas con infusión de nicotina a los adolescentes. Mientras tanto, la marihuana todavía sólo es legal en algunos estados, e incluso esas leyes son turbias.
"Queremos que la gente entienda que somos una compañía diferente a Juul", dijo Vasan. Aun así, el pequeño grupo de inversionistas de Pax es casi idéntico al de Juul. Cuando Pax y Juul se separaron, los accionistas de Pax recibieron acciones en ambas compañías, dijo Vasan.
