La aerolínea de bajo costo JetSmart Airlines SpA está en conversaciones con los Gobiernos de Chile y Argentina sobre la ayuda al sector en medio de la pandemia de coronavirus, dijo su director ejecutivo, Estuardo Ortíz, en una entrevista a radio Bloomberg.
Las posibles soluciones incluyen diferir los pagos de impuestos y el acceso a préstamos preferenciales, similar a lo que el prestamista de desarrollo, BNDES, está ofreciendo en Brasil, dijo Ortíz. Las conversaciones comenzaron a mediados de marzo, incluso antes de que el impacto del coronavirus se sintiera por completo. No especificó qué progreso se había hecho, y los Gobiernos de Chile y Argentina no respondieron de inmediato cuando se les consultó por el tema.
La aerolínea con sede en Santiago, propiedad del fondo de inversión estadounidense Indigo Partners LLC, actualmente está operando al 12% de su capacidad en Chile y planea aumentar eso al 15% en mayo. Después de comenzar a operar en Chile en 2017, compró las operaciones de Norwegian Air en Argentina en diciembre del año pasado, justo cuando se detectaron los primeros casos de coronavirus en China. El gobierno argentino ha suspendido todos los vuelos y la venta de tiquetes hasta el 1 de septiembre. En Chile, la contracción en el mercado local ha sido dramática.
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“Estamos hablando de un mercado que en su conjunto está funcionando a un 6% o 7% de sus vuelos normales”, dijo Ortiz. Aún así, las tasas de ocupación en las rutas que vuelan son buenas, dijo.
El mercado interno chileno está controlado en un 58% por Latam Airlines SA, 26% por Sky Airline SA y 15% por Jetsmart. Latam ha dicho que puede sobrevivir “por unos meses” sin ningún tipo de ayuda del gobierno.
Frontier Airlines, otra compañía propiedad de Indigo, está imponiendo desde esta semana un mandato para que sus viajeros se cubran la cara en sus vuelos en EE.UU. y planea cobrar de US$39 a US$89, dependiendo de la ruta, a cualquier pasajero que quiera garantizar un lugar al lado de un asiento central desocupado.
Jetsmart está tratando de “reducir drásticamente los costos” y ha suspendido a los empleados que se acogido a la ley de protección del empleo, bajo la cual el Gobierno les paga parte de sus salarios.
La aerolínea también ofrece vuelos internacionales a Brasil, Argentina, Colombia y Perú. A pesar de las restricciones actuales, sigue siendo optimista, dijo Ortíz. “Nuestros planes para crecer y expandirse a otros países de la región no han cambiado”, dijo.