JPMorgan Chase & Co. está buscando hacer más negocios con medianas empresas en el extranjero, expandiéndose en un mercado tradicionalmente dominado por bancos locales, de acuerdo con fuentes al tanto del tema. La compañía planea contratar banqueros en México, Francia, España y el Reino Unido para formar equipos para su banca comercial, que normalmente se enfoca en compañías estadounidenses, dijo una de las fuentes, quien pidió no ser identificada debido a que los planes son de carácter privado. El objetivo es profundizar las relaciones con compañías que no sean estadounidenses en sus ciudades de origen y ayudarlas a expandirse globalmente.
El cambio se basa en una estrategia internacional ideada por Todd Maclin, ex director ejecutivo de la banca comercial de JPMorgan, que ofrece asesoría, servicios de tesorería y préstamos a compañías que generan hasta US$2.000 millones en ingresos.
Maclin creó un equipo en 2005 para ayudar a empresas estadounidenses medianas a establecer filiales en todo el mundo. Liderados por Morgan McGrath, los banqueros internacionales históricamente solo han cubierto las filiales locales de compañías estadounidenses en el extranjero y no las firmas extranjeras en esas áreas, dijo una persona.
Como parte de la nueva iniciativa, JPMorgan contrató el mes pasado a Rafael Calderón, de Barclays Plc, para que dirija la banca de clientes corporativos en México. Calderón está formando un equipo para ayudar a cubrir compañías que son demasiado pequeñas para trabajar con la banca de inversión de JPMorgan. El banco está tratando de emular el modelo de México en algunos países europeos, aunque los esfuerzos son preliminares, dijeron las personas, citando discusiones internas. Es posible que, a la larga, también intente expandirse en Asia, dependiendo de cuán exitosa sea la estrategia en otros lados. En algunos casos, las empresas que habían sido cubiertas por la banca de inversión se trasladarán a la banca comercial.
JPMorgan se está de incorporar a un espacio dominado durante mucho tiempo por bancos locales que tienen estrechas relaciones con compañías en sus países de origen, como Banco Bilbao Vizcaya Argentaria SA y Banco Santander SA, en España. El desafío será la caza furtiva de esos clientes que generalmente generan entre US$500 millones y US$2.000 millones en ingresos.
La banca de inversión ha tenido durante mucho tiempo presencia internacional con grandes multinacionales, pero no se ha centrado tanto en compañías locales más pequeñas. Una portavoz de JPMorgan declinó hacer comentarios.
La banca comercial ha sido un ingrediente clave en el crecimiento de JPMorgan en los últimos años, y sus ingresos se expandieron un 26 por ciento desde que Doug Petno asumió como CEO de la unidad en 2012. Eso se compara con una expansión del 2,7 por ciento en los ingresos totales de la firma durante ese período. La banca internacional contribuyó con aproximadamente el 4 por ciento de los US$8.600 millones en ingresos de la banca comercial el año pasado, según muestran los registros regulatorios. JPMorgan tiene como objetivo generar ingresos internacionales anuales de US$500 millones en la banca comercial en los próximos cinco años, de acuerdo con las directrices en su presentación más reciente a los inversores realizada en febrero.
