El Fondo Monetario Internacional se dispone a recortar su proyección de crecimiento mundial, mientras que la directora gerente de la entidad, Christine Lagarde, advirtió que las guerras comerciales y el crédito más ajustado están afectando las perspectivas.
Tres meses después de predecir que la economía mundial crecería un 3,9 por ciento este año y el siguiente, Lagarde señaló en Washington que ya no es tan optimista. El fondo actualizará su informe Perspectivas de la Economía Mundial el 9 de octubre antes de abrir su reunión anual en Bali, Indonesia.
"Hace seis meses, señalé nubes de riesgo en el horizonte", dijo Lagarde, de acuerdo con sus comentarios preparados. "Hoy, algunos de esos riesgos han comenzado a materializarse".
Si bien Lagarde reconoció que la expansión global sigue siendo la más rápida en siete años, los datos recientes sugieren un enfriamiento. La actividad fabril se desplomó de Asia a Europa en septiembre, según mostraron datos dados a conocer el lunes.
Lagarde dijo que el discurso proteccionista se estaba convirtiendo en "verdaderas barreras comerciales", extendiendo la incertidumbre entre las empresas y los consumidores. Un fortalecimiento del dólar estadounidense y las condiciones financieras más restringidas han aumentado los desafíos para muchos mercados emergentes, dijo.
Lagarde instó a los países a resolver sus disputas comerciales, advirtiendo que la fractura de las cadenas de suministro corporativas podría tener efectos "devastadores". "La historia muestra que, si bien es tentador navegar solo, los países deben resistir el canto de sirena de la autosuficiencia porque, como cuentan las leyendas griegas, eso lleva al naufragio", dijo, sin mencionar a los países que están levantando nuevas barreras.
Lagarde ha advertido en reiteradas ocasiones que una guerra comercial a gran escala podría frenar el crecimiento en un momento en que el mundo está disfrutando de la mayor expansión en años. Pero EE.UU. y China no retroceden, y no dejan ver un final a lo que podría ser una larga y contundente disputa.
Acuerdos comerciales
Los ministros de Finanzas de los 189 países miembros del FMI se reunirán la próxima semana en Indonesia con la esperanza de encontrar un terreno común en el comercio, una tarea desafiante desde que Trump asumió el cargo, prometiendo desmantelar los acuerdos comerciales que considera injustos y promover un enfoque de "Estados Unidos primero" en política exterior.
Lagarde advirtió a las naciones que deben protegerse de las "turbulencias fiscales y financieras". Dijo que la deuda pública y privada alcanzó un récord de US$182 billones, casi un 60 por ciento más que en 2007. Los mercados emergentes y los países en desarrollo están siendo afectados a medida que los bancos centrales elevan las tasas de interés en las economías avanzadas, agregó.
"Ese proceso podría ser aún más difícil si se acelera repentinamente", dijo. "Podría llevar a correcciones del mercado, fuertes movimientos del tipo de cambio y un mayor debilitamiento de los flujos de capital".
Lagarde hizo un llamado a los gobiernos para que reconstruyan la confianza en las instituciones y en los encargados de política, que se ha visto afectada a medida que el crecimiento no ha logrado elevar el nivel de vida de la gente común. Desde 1980, el uno por ciento de las personas con mayores ingresos ha captado el doble de las ganancias del crecimiento que el 50 por ciento con menores ingresos, explicó.
"En demasiados casos, los trabajadores y las familias ahora están convencidos de que el sistema está manipulado de alguna manera, que las probabilidades están en su contra", dijo.