La guerra de Kenia contra la caza furtiva de elefantes y jirafas está dando frutos. Las poblaciones de ambas especies están en aumento.
La población de elefantes ha crecido un 12% en los últimos siete años a 36.169 animales, mientras que el número de jirafas ha aumentado un 49% desde 2019 a 34.240, según un informe publicado por el Ministerio de Turismo y Vida Silvestre después del primer censo nacional de vida silvestre de Kenia.
El paquidermo se caza principalmente por su marfil, mientras que las jirafas son víctimas de la caza furtiva en busca de carne, huesos, piel y el pelo de la cola.
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“Los esfuerzos realizados por el Gobierno para frenar la caza furtiva de elefantes en diferentes ecosistemas continúan siendo productivos”, según el informe. “Ha habido un aumento notable de las tres especies de jirafas que se encuentran en Kenia. Los esfuerzos para aumentar las penas por delitos relacionados con especies amenazadas parecen estar dando sus frutos”.
Durante el censo realizado entre abril y julio se contabilizaron más de 30 especies de mamíferos, aves y especies marinas. El ejercicio cubrió más de 343.380 kilómetros cuadrados, o el 59% de la masa de tierra de Kenia.
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No proteger a estas especies podría poner en peligro la industria del turismo de la nación, que es la principal fuente de ingresos de divisas del país después de las remesas y los envíos agrícolas y representa alrededor del 10% del producto interno bruto. De 1977 a 2016, la cantidad de vida silvestre, la principal atracción turística del país, disminuyó en un 68% tanto dentro como fuera de las áreas protegidas, según una investigación publicada en PLOS One, una revista científica de acceso abierto revisada por pares.
Para apoyar los esfuerzos de conservación de la nación, el informe recomendó que Kenia asigne un presupuesto para apoyar el monitoreo anual y activo de especies raras y endémicas en el país donde los parques de vida silvestre ayudaron a atraer a casi tres millones de visitantes un año antes de la pandemia de coronavirus.
“Se requiere apoyo presupuestario inmediato para establecer el estado de las especies actualmente amenazadas por el comercio ilegal y la carne de animales silvestres como pangolines, antílopes y gacelas”, dijo el informe.