El gobierno del venezolano Nicolás Maduro se está acercando a facciones políticas más pequeñas, después de que se rompieran las negociaciones con la principal coalición opositora del país. El gobierno estableció un “diálogo nacional” con algunos representantes de la oposición, dijo el ministro de Información, Jorge Rodríguez, el lunes.
El gobierno y estos grupos pidieron un programa de petróleo por alimentos con supervisión de Naciones Unidas, y acordaron que los legisladores del partido socialista PSUV de Maduro volverán a la Asamblea Nacional controlada por la oposición, según la televisión estatal, que no nombró a los partidos políticos más pequeños. Los otros puntos de acuerdo incluyen renovar el cuerpo electoral y denunciar las sanciones impuestas por Estados Unidos.
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Después de perder el control de la asamblea hace más de tres años, Maduro creó un cuerpo legislativo paralelo llamado Asamblea Constituyente para socavar la autoridad de sus oponentes. Las conversaciones entre los negociadores de Maduro y el líder de la oposición, Juan Guaidó, buscaban terminar con la crisis política del país, pero finalizaron sin un acuerdo este fin de semana después de cuatro meses. Guaidó, quien es el líder de la Asamblea Nacional, es reconocido por Estados Unidos y docenas de sus aliados como el presidente legítimo de Venezuela, debido a irregularidades en torno a la reelección de Maduro en 2018.
Guaidó dijo este lunes que el gobierno se escapó de las conversaciones con “excusas baratas”. Exige que Maduro renuncie y que un gobierno de transición organice nuevas elecciones.
La crisis política y el colapso económico de Venezuela han llevado a millones de personas a huir a los países vecinos, en medio del hambre y la escasez generalizadas.
