Nike se enfrenta a la presión de retirar una de sus principales marcas de zapatillas de deporte después de que una clienta presentara una petición en línea alegando que el diseño se parece a la palabra árabe "Allah".
La petición indica que es "espantoso" permitir que se utilice el nombre de Dios en las zapatillas Nike Air Max 270, que "seguramente serán pisoteadas, pateadas y ensuciadas con barro o incluso con inmundicias". La clienta, Saiqa Noreen, le pidió a Nike que retirara de inmediato de las ventas mundiales "ese zapato ofensivo y blasfemo, así como todos los productos con el logotipo de diseño que se asemeja a la palabra Alá".
What a shame! @Nike act #blasphemous by writing #Allah on "Air Max 270 Trainers". You should #remove all the articles atonce & stop further production. This world is for #love, don't fill it with #HATE. Its not only #offensive to #Muslims rather offensive to the whole #mankind pic.twitter.com/kRJcKlfviP
— umar ishaque butt (@capisces) January 29, 2019Esto no le gusta a los autoritariosEl ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.Hoy más que nunca Suscribite
Nike informó en un comunicado que el logotipo era una representación estilizada de la marca comercial Air Max. "Cualquier otro significado o representación percibida es involuntario", dijo. "Nike respeta a todas las religiones y tomamos en serio las preocupaciones de esta naturaleza", indicó.
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La petición, que apunta a 25.000 firmas, la han firmado más de 16.000 personas.
Nike se enfrentó a un problema similar en 1997. El Consejo de Relaciones Americano-Islámicas protestó contra el logotipo de la compañía en ciertas zapatillas deportivas, diciendo que se parecía a la palabra "Allah" en escritura árabe. Nike dijo en ese momento que lamentaba cualquier malentendido, explicando que el logotipo debía lucir como llamas y retiró una línea de zapatillas.
La compañía de ropa deportiva más grande del mundo también recibió críticas el año pasado por su campaña publicitaria con Colin Kaepernick que en un principio inquietó a los inversionistas, pero que luego tuvo consecuencias pequeñas. El mariscal de campo convertido en activista de la NFL provocó una controversia por arrodillarse durante el himno nacional en protesta por la brutalidad policial y la injusticia racial.