La productividad en EE.UU. registró la mayor caída en el primer trimestre desde finales de 2015, ya que la mayor economía del mundo se contrajo a un ritmo más rápido que el de los recortes de empleos y de horas debido a la pandemia.
La producción por trabajador del sector no agrícola por hora disminuyó a una tasa anualizada de 2,5% en los primeros tres meses del año, según cifras del Departamento de Trabajo del jueves. La disminución coincidió con la mediana de las estimaciones del sondeo a economistas de Bloomberg y siguió a un aumento del 1,2% en el cuarto trimestre.
La producción cayó a una tasa anualizada del 6,2%, mientras que las horas trabajadas disminuyeron un 3,8%. Contabilizando la productividad, los costos laborales unitarios aumentaron a una tasa de 4,8% después de subir a un ritmo de 0,9% en los tres meses anteriores.
La expansión récord de EE.UU. llegó a un final casi oficial en el primer trimestre, ya que las autoridades de los estados ordenaron a muchas empresas a cerrar u operar de manera limitada para evitar la propagación del coronavirus. Con unas ventas limitadas hasta que la economía se reanude, las compañías probablemente continuarán reduciendo las horas de trabajo en un intento por apuntalar la productividad.
Otro informe separado mostró que 3,17 millones de estadounidenses presentaron solicitudes de desempleo en la semana que terminó el 2 de mayo, lo que eleva el total a aproximadamente 33,5 millones desde que el coronavirus comenzó a cerrar restaurantes, fábricas y oficinas de costa a costa a mediados de marzo.