El Reino Unido ordenó la incautación del superyate Phi de un puerto deportivo en el distrito financiero de Londres, el primer buque de este tipo detenido en aguas británicas desde que el país anunció una serie de medidas para castigar a Rusia por su invasión de Ucrania.
El barco de 58,5 metros de eslora es propiedad de un empresario ruso y está valorado en 38 millones de libras (US$50 millones), dijo el martes 29 el Departamento de Transporte en un comunicado enviado por correo electrónico. No nombró al propietario, pero el secretario de Transporte, Grant Shapps, dijo que la acción del Reino Unido debería proporcionar una “advertencia clara y contundente” al presidente ruso, Vladímir Putin, “y sus secuaces”.
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“Detener a Phi demuestra, una vez más, que podemos tomar y tomaremos las medidas más fuertes posibles contra aquellos que buscan beneficiarse de las conexiones rusas”, dijo Shapps en el comunicado.
El Phi, llamado así por un principio matemático también conocido como la proporción áurea, estaba en Canary Wharf para los premios de superyates y tenía previsto partir el martes al mediodía, según el comunicado. El buque es el tercer yate más grande construido por Royal Huisman Shipyard BV. Puede acomodar hasta 12 pasajeros y cuenta con una bodega y una piscina de agua dulce.
JPMorgan obtuvo una orden judicial autorizando a la autoridad portuaria de Gibraltar a detener un yate de 73 metros llamado Axioma propiedad de Dmitri Pumpyansky la semana pasada.
