Según el editor de la revista médica The Lancet, el retraso en la respuesta del Gobierno del Reino Unido a la pandemia de coronavirus ha dejado al sistema de salud “totalmente sin preparación” para la ola prevista de pacientes en estado crítico.
En una carta publicada en el sitio web de la revista, Richard Horton describió el caos y el pánico en el Servicio Nacional de Salud (NHS, del inglés) basando sus comentarios en los mensajes que recibió de los trabajadores. El Gobierno debería haber ampliado la capacidad de prueba el mes pasado, garantizar la distribución de equipos de protección e intensificado la capacitación, dijo.
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“No tomaron ninguna de esas medidas”, escribió. “Pacientes morirán innecesariamente. El personal del NHS morirá innecesariamente. Es, de hecho, como escribió un trabajador sanitario la semana pasada, ‘un escándalo nacional’. Aún no se percibe la gravedad de ese escándalo”.
Los hospitales del Reino Unido están incrementando las medidas ante una posible avalancha de casos de coronavirus a fin de evitar la cifra de víctimas mortales en Italia, que ha informado la mayor cantidad de muertes en todo el mundo. Si bien Horton y otros han hecho sonar la alarma en las últimas semanas, el Gobierno ha impuesto las restricciones más estrictas al movimiento de personas al que el país se ha enfrentado en tiempos de paz.
Las medidas británicas de cuarentena y distanciamiento social deberían ayudar a evitar que la capacidad de cuidados intensivos se vea desbordada, según Neil Ferguson, un investigador de Imperial College London, que realiza proyecciones matemáticas sobre brotes virales. La presión en las unidades de cuidados intensivos debería alcanzar su punto máximo en aproximadamente dos o tres semanas, y algunos hospitales sufrirán más presión que otros, dijo el miércoles a una comisión parlamentaria.
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El personal del NHS, financiado con fondos públicos, ha expresado su creciente preocupación en los últimos días por la falta de equipos y otras medidas para reforzar el sistema. En respuesta a una encuesta realizada por el Health Service Journal del Reino Unido, 34 organismos de gestión de hospitales públicos señalaron su preocupación por la falta de personal, pruebas y equipo de protección personal. Un ejecutivo dijo que el problema había causado una “casi revuelta” por parte de los empleados, mientras que al menos una tercera parte informó que pronto se quedaría sin capacidad para atender a pacientes en cuidados intensivos.
El Reino Unido ha confirmado casi 12.000 infecciones y unas 580 muertes. En una mayor incertidumbre sobre la respuesta del Gobierno británico al coronavirus, el primer ministro Boris Johnson se convirtió en el primer líder mundial en anunciar el viernes que ha dado positivo.
