Tesla se encuentra en proceso de adquirir terrenos en Shanghái para su primera fábrica fuera de EE.UU., según fuentes cercanas al asunto, y avanza con sus planes de establecer producción en China tras meses de turbulencias ligadas a su director ejecutivo, Elon Musk.
El fabricante de vehículos eléctricos es el único postor por un terreno valuado en cerca de 1.000 millones de yuanes (US$145 millones), detallaron las fuentes de manera anónima. La decisión del gobierno local de asignar las tierras a Tesla se podría dar a conocer este mes, señalaron.
En julio, Tesla llegó a un acuerdo preliminar con las autoridades de Shanghái para construir una fábrica que llegará a producir 500.000 vehículos eléctricos al año, más de los que ha fabricado su única unidad de ensamblaje en EE.UU. La transacción permitiría a la compañía de Palo Alto, California, evitar el pago de aranceles de importación de hasta 40% y ofrecer automóviles más baratos en el mercado de vehículos eléctricos más grande del mundo.
No fue posible contactarse con las autoridades de Shanghái ni con representantes de Tesla. La compañía aclaró que la planta aumentará su producción actual y sus operaciones de fabricación en EE.UU. no se verán afectadas.