Carlos Maslatón participó de una conferencia de prensa organizada por estudiantes de la Escuela de Comunicación del Grupo Perfil. En este marco, el abogado liberal se refirió a sus diferencias con Javier Milei y criticó la venta de candidaturas de La Libertad Avanza. “Milei ha establecido un sistema de franquiciado donde entrega el nombre, la imagen y bendice una fórmula, pero hay que pagarle a él. Los números son de los más diversos según el cargo. Una candidatura a gobernador anda cerca de los 100 mil dólares”, afirmó.
El economista y especialista en finanzas también analizó la gestión de Sergio Massa como superministro. “Brillante políticamente, con dos fallas económicas. Una, su negativa a liberar el mercado de cambios. y otra, su negativa a terminar con la bicicleta financiera de las Leliq. Se lo dije a él ni bien asumió, porque me llamó y quería saber lo que opinaba”, agregó Maslatón en el Ciclo de Entrevistas a cargo de Rodrigo Lloret, director de Perfil Educación.
—Usted planteó diferencias públicas con Milei por la incapacidad de armar equipos de trabajo. En ese marco, ¿cómo imagina un posible gobierno de Javier Milei?
—Milei tiene algunas fallas de comportamiento que son malas para un político, no le gusta que haya personas con alto perfil a su alrededor. Inevitablemente un gobierno se va a formar con personas de alto perfil. Veo fallas desde ese punto de vista, de programa económico y también fallas en general. Por ejemplo, la dolarización que tiró, yo dije que era incorrecta, pero no porque la dolarización estuviera mal, sino por cómo él la presentó, eso está mal, es inaplicable. De hecho, ya hay dos personas que incorporó a su equipo que han salido de una u otra manera a desmentir o a moderar la intensidad de sus declaraciones. Cuando empezaron los actos públicos y los de seguridad le indicaban que tenía que subir al escenario por la parte de atrás, Milei dijo: “Yo soy un rockstar, tengo que entrar por el medio para que la gente me salude”. Ese es el problema que él tiene. De chiquito tenía una banda de rock, creo que era cantante y todo cantante de una banda de rock sueña con esos grandes recitales de cien mil personas, pero es malo llevar esa mentalidad a la política. Porque la política es más horizontal en la conducción y además, el político es igual que el ciudadano, tiene que creer que es exactamente igual a cualquiera y no que está en un nivel superior. Javier tiene algunas deformaciones que lo van a perjudicar, si asume. Obviamente, toda persona se puede reformar y sorprender.
—Dejando de lado el liberalismo, que es en lo que acuerda. ¿Qué lo diferencia de Milei en el orden político?
—Mi primera diferencia fue el armado político. Yo hubiera tomado los cien mil militantes potenciales que había y hubiera suprimido primero los que están mal de la cabeza. La política es un juntadero de gente que está mal y hubiera suprimido a los que tienen tendencia a cometer delitos o a acomodarse. La política junta locos y chorros. Vos tenés que detectarlos porque te hacen un desastre en una campaña o en un gobierno cuando esos tipos saltan. Lo que hizo fue dejar de lado esa militancia y empezar a buscar dirigentes tradicionales en las provincias o muertos políticos provenientes de otros partidos. Entonces lo que se dijo fue: “¿No quisieras vos estar acá con nosotros? Bueno, vale tanto”. Y se empezaron a vender candidaturas. Dicen: “Si vos me pagás, yo te doy la chapa, yo dejo que tu boleta vaya pegada en la de Milei en la campaña electoral”. Esto es lo que sé, y estoy totalmente en contra. Lo que vemos hasta ahora es que eso trae malos resultados. He tenido mucha diferencia de contenido de campaña con él. Una es la dolarización, pero también hay una visión de él sobre lo que es el gran problema argentino que yo no comparto. Él cree que el gran problema argentino es el gasto público y yo creo que el gasto central del Estado es un problema, pero más problema es el gasto financiero del Estado, que es una sección autónoma dentro del Estado, que tiene vida propia, que no depende de la otra, que todo el problema de la deuda Argentina, tanto la deuda que deriva de la tesorería y la que es en dólares, la que es en pesos y la que deriva del banco central que es la mayor preocupación en este momento. Y él cree que para solucionar estos problemas de deuda primero hay que solucionar el tema fiscal. Y yo digo que este problema de la deuda se soluciona autónomamente del problema fiscal. Y después me ocuparía del problema fiscal, porque él usa la palabra “plan motosierra” que va a recortar todo el gasto público. Si va a empezar el gobierno recortando el gasto público como él cree que lo va a recortar, el gobierno va a caer. Va directamente a fracasar. Mientras la deuda va a seguir en ascenso.
—¿A qué se refiere cuando dice que en el espacio de Milei se venden las candidaturas?
—Que los operadores de él van por las provincias buscando potenciales interesados y les dicen: “Una candidatura para diputado vale tanto, la de gobernador vale tanto, la de concejal vale tanto”. La candidatura más abajo en la lista vale menos, cuando está más arriba, vale más.
—¿Sabe cuánto valen?
—Tengo algunas versiones.
—¿Puede decirnos esas versiones?
—Valen 30 mil dólares, 50 mil dólares, 85 mil dólares, 100 mil dólares. Después hay números ridículos que suenan, que yo no tengo información. Dicen que llegan a 500 mil o un millón, pero para mí no es así. Para mi valen menos. Además, está mala ronda de elecciones en Tierra del Fuego, las municipales de Córdoba, las municipales de Mendoza, La Rioja, Neuquén, y todo esto que ya se fue probando, Río Negro, degradó los precios. Quiero aclarar que es algo que nunca vimos. La primera vez que se ve en cuarenta años de democracia que el líder dice: “Yo franquicio cargos”. O sea, yo te vendo una franquicia, vos podés usar el logo, el nombre mi cara el dibujito con el león, pero todo eso vale tanto. Siempre en la política de arriba se baja plata para abajo, no desde abajo para arriba.
—¿Usted está afirmando que Milei vende candidaturas en las provincias?
—Los precios varían según el cargo, según la importancia llegan a 100 mil y 200 mil dólares. No quiere decir que lo haya conseguido, que lo intentó sí y parcialmente lo logró.
—Es un título muy importante el que nos está dando para esta entrevista, a partir de su afirmación de que Milei cobra entre 100 mil y 200 mil dólares las candidaturas.
—No, no pongan 100 mil dólares por candidaturas. Lo correcto es que ha establecido un sistema de franquiciado donde él entrega el nombre, la imagen y bendice una fórmula, pero hay que pagarle a él. Los números son de los más diversos según el cargo. Milei vende una candidatura a gobernador por 100 mil dólares.
—Esto es algo que usted nunca había dicho públicamente. Seguramente va haber repercusiones…
—Proceda.
—¿Dónde se sostiene la confianza que usted tiene en la economía del país?
—La tendencia argentina es muy positiva para los próximos años. No se ve, sé que no se ve y que hay mucho disgusto. Venimos de una caída enorme, no estamos arriba, estamos empezando a subir. Mi predicción es que Argentina va a ser impresionante en los próximos años, me va a sorprender a mí mismo. De hecho, el nivel de actividad que tenemos hoy mismo es algo que me deja sorprendido por la velocidad de recuperación del país. Con estas condiciones objetivas el que asuma el 10 de diciembre tiene todo más o menos habilitado como para que le vaya bien, tiene que ser muy malo como para que le vaya mal.
—¿Entonces, cómo se explica la inflación de dos dígitos mensuales?
—Son varios factores, algunos económicos puros y otros de errores en las políticas económicas. La inflación argentina la explico por tres causas. Dos buenas son que el país es muy barato, los precios van a subir y los ingresos también, como parte de la recuperación económica. El otro factor es la inflación mundial. No la vas a ver en el índice de precio, pero es inevitable que a la Argentina le pegue eso. Lo negativo es una medida ideológica, que es el déficit cuasifiscal del Banco Central. Que es la idea de que el Banco tiene que absorber moneda que fabrica y tiene que pagar intereses sobre esa moneda, que eran las Lebacs y ahora son las Leliqs. Eso devenga intereses todos los días, bajo la creencia de la mayoría de los economistas de que esa absorción de dinero evita la inflación. Yo digo que esa absorción de dinero remunerado genera la inseguridad inflacionaria que tenemos ahora. La inflación que tenemos ahora tiene un gran componente psicológico, es correcto lo que dijo un funcionario hace un tiempo, y es consecuencia de este problema. Hasta que no se solucione vas a tener presión inflacionaria. Yo soy muy positivo, creo que en dos años vamos a tener mucha menos inflación, cuando nos acerquemos a los precios internacionales, los precios se van a estabilizar solos. Yo no atribuyó esto a errores políticos, son errores ideológicos.
—¿Cómo califica la gestión de Sergio Massa?
—Brillante políticamente, con dos fallas económicas. Una su negativa a liberar el mercado de cambios y otra su negativa a terminar con la bicicleta financiera de las leliqs. Se lo dije a él ni bien asumió, porque me llamó y quería saber lo que opinaba. Le dije que iba a descollar porque tiene manejo políticamente, porque tiene un gran manejo y entiende el poder, todo lo que le falta a Javier Milei, pero le dije que arregle estas dos cosas. Me dio a entender que no podía le dije que esto que no podes arreglar es lo que va a torpedear tu propio gobierno. Si hace un año cuando asumió liberaba el tipo de cambio, se bancaba un cimbronazo transitorio y frenaba el tema de las Leliq, hoy era presidente.
—¿Tiene libertad para hablar de política y economía en C5N?
—Total libertad, yo nunca hubiera aceptado ser panelista si me condicionan el contenido. Eso es una cosa que ni siquiera se habló. No es que alguien me dijo: “Vos acá vas a tener libertad de opinión”. O que yo pregunté: “¿Puedo hablar de cualquier cosa?”. No, así no arrancó. Eso fue algo que está sobreentendido. No sé cómo se manejan los medios en general, me cuesta pensar que alguien que viene con opinión propia le condicione el contenido. Yo no suelo tener cosas fijas en mi vida, como asistir regularmente a algo. Yo soy una persona que improvisa cada día y quiero tener libertad, pero me insistieron tanto que acepté por este año. Pero puse condiciones: voy siempre que no juegue Boca, que no juegue la Selección, que tenga un recital o que no tenga viaje. Con lo cual deben ser más o menos de la cantidad de programas, ya hubieron 65 programas, debo haber estado en 42.
—¿El resto de las personas que trabajan en C5N tienen la libertad que usted tiene para, por ejemplo, criticar algo del kirchnerismo?
—Yo no creo que le pongan condiciones, pero seguramente la mayoría de mis compañeros se adecue al deseo periodístico del canal. Y yo creo que han querido que yo esté porque soy alguien que no viene de ese palo kirchnerista, pero que tampoco soy un insultador que dice: “Ustedes se robaron el producto bruto”. Esas cosas yo no las digo porque no tienen sentido. Pero de nadie habló así, es una cosa muy grave. Bueno durante la cuarentena yo estuve muy enojado, yo publiqué cosas fulminantes contra todos. Yo me sentí sin libertad, asfixiado. Pero, en general, yo no hago críticas políticas destructivas, no hago acusaciones en falso, no atribuyó el mal del país a que se acabaron la plata porque no es así. Son errores de política económica.
—¿A raíz de las diferencias entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, Bullrich debe romper con Juntos por el Cambio?
—Es un problema de ellos. Pero si me pongo en analista político te digo que ya no lo puede hacer porque es tarde. Las listas se presentan el 24 de junio, faltan poco y la presentación es algo muy complicado técnicamente. Implica no solamente la fórmula presidencial, senadores, diputada en 27 provincias, titulares y suplentes con paridad de género. La gente tiene que firmar todo, están las compatibilidades, los avales, el domicilio, el patrimonio que después hay que declarar, ver si hay antecedentes penales. La trenza política ya está acordada. Están todos juntos y están dando una imagen de desunión. Creo que Patricia Bullrich está exagerando con la no incorporación de gente de otros sectores porque cree que le van a jugar en contra. Larreta está bien en ese punto, pero es un tipo que luce debilitado frente a la opinión pública frente a Bullrich. Pero no creo que puedan romper, no tienen tiempo. Si se diese quizá festeje Milei, que está esperando juntarse con Mauricio Macri y Bullrich. Si eso sucediera me considero en libertad de acción, porque tengo un compromiso con la Libertad Avanza en la medida que no arregle con Juntos por el Cambio.
—Agradecemos su participación en el Ciclo de Entrevistas con estudiantes de Periodismo de Perfil Educación y le damos la posibilidad de hacer un comentario final.
—Me encanta que estudien Periodismo, es un tema personal. Ahora va a salir un libro mío, y empieza sobre cómo soy yo con las noticias. Admiro al periodismo. Soy dependiente de las noticias. Ahora que estuve cuarenta minutos sin el teléfono, necesito saber qué está pasando. Antes escuchaba radio de todo el mundo con onda corta, ahora estoy meta breaking news. El periodismo es una hermosa actividad. Yo sé que se ganaba mucha más plata antes, pero creo que va a resurgir porque a pesar de que hay redes y todo eso, el contenido es muy importante. No se suplanta el contenido porque cada uno tenga su Twitter. Vamos, mucha fuerza. Ustedes metanle con todo a la calidad de la información, a la seriedad informativa. Armen sus propias opiniones, escriban y procedan en todas las líneas que les va a ir muy bien.
Por Melody Blanco, Brenda Martinez García y Martín de los Santos
Estudiantes de Periodismo de Perfil Comunicación
Escuela de Comunicación del Grupo Perfil