Un mamiferoide de 25 centímetros de longitud muy parecido a la “ardilla” de la película infantil La Era de hielo vivió en el oeste de Argentina hace 230 millones de años. Ahora sus restos fueron hallados e identificados por un equipo de paleontólogos, que la bautizó Pseudotherium argentinus.
Este ejemplar, que habitaba durante el período triásico lo que hoy es la provincia de San Juan fue encontrado en 2006 por el investigador Ricardo Martínez. Ahora, casi tres lustros más tarde, la descripción detallada de la especie acaba de ser publicada en la revista científica Plos One, según publicó la agencia de la Universidad de La Matanza.
Por el parecido del cráneo hallado con el personaje del film, los paleontólogos pensaron en nombrar esta nueva especie en alusión a Scrat, el simpático personaje con dientitos de sable. Pero, finalmente, lo bautizaron Pseudotherium argentinus. Medía unos 25 centímetros de longitud y fue hallada en Ischigualasto junto a dos de los dinosaurios más antiguos de los que se tienen conocimiento.
El doctor Ricardo Martínez, investigador del Instituto y Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de San Juan, comentó a la Agencia CTyS-UNLaM: “La nueva especie tiene el hocico muy largo y chato, de poca profundidad. Sus colmillos también son largos y están ubicados casi en la punta del hocico, por lo que el parecido es tremendo”.
Martínez es un científico acostumbrado a los hallazgos originales: ya lleva más de una docena de nuevas especies descriptas y descubiertas. En el mismo sitio del descubrimiento, conocido como Valle de la Luna, este Scrat del Triásico fue rescatado junto al dinosaurio Panphagia protos, uno de los sauropodomorfos más antiguos conocidos hasta hoy, y al fémur del primero y único protodinosaurio lagerpétido descubierto en San Juan.
A diferencia de la ardilla de la película, este mamiferoide vivía en un ambiente más cálido que el actual, en un entorno de abundante flora, compuesto básicamente por helechos y coníferas. Según Martínez, este animalito posiblemente tenía una alimentación muy diferente a la del personaje de la película: “No se alimentaba de bellotas, sino que seguramente comía insectos o animales más pequeños”. “Pero, a esta altura, no se puede saber mucho, porque solo contamos con un espécimen”, aclaró. Si hubiera muchos individuos para analizar, uno podría ver si hay variabilidad entre machos y hembras”.
