La carne roja, vinculada al riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares y algunos tipos de cáncer como el de páncreas, nuevamente es centro de polémica pues podría ser causa del cáncer de vejiga, según un estudio divulgado en Estados Unidos en una revista especializada.
Sin embargo, para todos aquellos que no resisten la tentación de una hamburguesa con queso y panceta hay una buena noticia: los científicos no encontraron asociación alguna entre el lomo, la panceta, la hamburguesa, la salchicha o el filete, y el cáncer. Pero lo que sí observaron es "una asociación indirecta real entre los fiambres de carne roja" y el cáncer de vejiga, indicaron los investigadores en el estudio publicado por la revista Cáncer.
En el procesamiento de los fiambres se añaden nitratos y nitritos a la carne para preservar y realzar el color y el sabor. "Los nitratos y nitritos son precursores de compuestos N-nitrosos, que inducen tumores en muchos órganos, incluida la vejiga, en varias especies animales", dice el estudio. Para el estudio, los científicos evaluaron el consumo de nitratos, nitritos y otros componentes encontrados en la carne roja, en unos 30.000 hombres y mujeres de 50 a 71 años, en ocho estados de Estados Unidos, y su relación con el cáncer. Los participantes del estudio fueron seguidos por hasta ocho años. Durante ese tiempo, 854 fueron diagnosticadas con cáncer de vejiga.
Los científicos hallaron que las personas cuyas dietas eran altas en nitritos de cualquier tipo, no sólo carne, y personas que consumían muchos nitratos de carne procesada, como los fiambres, tenían entre 28 y 29% más chances de desarrollar cáncer de vejiga que aquellos que consumieron menos cantidades de estos componentes. La investigación fue dirigida por la doctora Amanda Cross del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Fuente: AFP