Mientras continúa el proceso de descentralización de las pruebas de diagnóstico del coronavirus –y el Gobierno apura la compra de más reactivos–, los expertos llaman a ampliar el número de testeos y afirman que esta es una condición fundamental para comenzar a salir del aislamiento obligatorio “sin que se produzca un rebrote de casos”.
Hasta ahora, el Ministerio de Salud de la Nación ya puso en funcionamiento 51 laboratorios en todo el país para realizar estos tests. Las pruebas de detección se basan en una técnica molecular llamada PCR (reacción en cadena de la polimerasa). Es una técnica compleja, que requiere equipamiento específico (máquinas llamadas termocicladores en tiempo real, donde se producen las reacciones) y cuyos resultados son muy confiables para determinar si una persona está o no infectada.
Esta prueba requiere del uso de reactivos importados en un momento en el que países de todo el mundo se disputan los insumos necesarios. Hasta ahora el Gobierno distribuyó 35 mil determinaciones en las distintas jurisdicciones (empezando por las que tienen más casos confirmados) y otras 65 mil se enviaron al Instituto Anlis-Malbrán. A esto se suman otros 120 mil reactivos que ingresarán al país este fin de semana, producto de distintas donaciones. También hay otro millón de reactivos acumulado entre donaciones y compras del Ministerio. Vale aclarar que una muestra (un hisopado de un individuo) puede requerir más de una determinación.
“En Argentina se analizaron 7.787 muestras hasta el día de ayer de laboratorios de todo el país, y el porcentaje de positividad fue de 18,25%”, explicó Carla Vizzotti, subsecretaria de Acceso a la Salud en el parte matutino que todos los días emite el Ministerio.
Todas las muestras que se procesan son las que cumplen con la definición de caso sospechoso, determinación que se amplió esta semana a toda persona con síntomas que en los últimos 14 días haya estado en el exterior, en contacto con un caso confirmado o que haya estado o resida en áreas de circulación comunitaria del virus (AMBA, Chaco, Santa Fe, Córdoba y Tierra del Fuego). Además de todo paciente con neumonía grave de etiología desconocida.
También esta semana se publicó en el Boletín oficial la Resolución 680/2020, que considera al coronavirus como enfermedad de notificación obligatoria. Esto es clave porque obliga a médicos y autoridades a cargar los datos de todo caso sospechoso al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS) en su plataforma informática. “Hay provincias que no cargan la información al sistema o la cargan de forma incompleta”, cuentan fuentes de Nación sobre las demoras en contabilizar los casos.
El Gobierno descartó la compra de los llamados “tests rápidos” que detectan la presencia de anticuerpos generados por el organismo del paciente ante la infección por Covid-19. Estas pruebas son muy útiles para hacer estudios epidemiológicos que permitan saber qué porcentaje de la población ha estado expuesta al virus, pero no muestran claramente si en ese momento una persona tiene la infección, como sí hace la PCR. El ministro Ginés González García había hablado de la posibilidad de adquirir estos tests, pero fuentes oficiales aclararon que fue China quien ofreció donar 200 mil de kits de diagnóstico rápido. “Si se acepta la donación, Anmat va a controlar que estén validados, y si están OK se van a usar en un muestreo poblacional, para saber si el virus está circulando entre la población, pero no para hacer test a todo el mundo”, explicaron.
Oportunidad. Para los expertos, es inviable realizar un testeo masivo pero sí es necesario hacer un testeo oportuno. “Testeo oportuno es poder diagnosticar rápidamente el caso sospechoso (cuya definición ahora se amplió) para aislarlo junto a sus contactos y así evitar la circulación y propagación del virus. Esta es una condición fundamental para evitar un rebrote fuerte cuando salgamos del aislamiento obligatorio generalizado”, dijo a PERFIL Adolfo Rubinstein, ex ministro de Salud de la Nación.
“Estamos muy atrás en esto. Necesitamos ampliar el número de testeo a por lo menos 2 mil por millón de habitantes (estamos ahora en aproximadamente 100 por millón) en dos a tres semanas. Ese es un piso. Para eso se necesitaría contar con aproximadamente 80 mil a 100 mil reactivos más”, sostuvo.
Por su parte, Ricardo Teijeiro, integrante de la Sociedad Argentina de Infectología y médico infectólogo del Hospital Pirovano, detalló que “en principio sería ideal ampliar ya el número de testeos diarios, pero también es cierto que no es fácil porque los kits están muy demandados por todos los países del mundo y los que hay hasta ahora apenas si dan abasto. Cuando tengamos mayor disponibilidad de kits podremos tener un mejor panorama de la realidad epidemiológica”, explicó.
“Cuando se hacen los tests hay que analizar varias cosas: cantidad de casos sospechosos testeados, la cantidad de casos positivos. Pero hay que tener en cuenta otra cosa en esta ecuación: no sabemos todavía la cantidad de casos que pueden estar infectados pero no están haciendo síntomas y por eso no consultan al médico. Para poder saber este número hay que esperar los primeros resultados de los controles de vigilancia epidemiológica donde se hacen tests a todos, independientemente de que sean casos sospechosos. Eso nos dará un mejor panorama”, concluyó el experto.
Morales: “No se hacen los suficientes”
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, volvió a asegurar que “en un par de semanas vamos a hacer que todos los que quieran ingresar a la provincia deban cumplir con el testeo”. En declaraciones a Radio La Red aseguró que eso se instrumentará en los próximos días, cuando tengan la capacidad necesaria. “Habilitaremos otros dos laboratorios en la provincia para determinaciones de presencia de virus, por medio de PCR”. Y también mencionó que sumarán tests rápidos que detectan si la persona estuvo infectada. Estos llegarán a Jujuy en unos diez días. “Buscamos poder seguir mostrando que Jujuy está libre de circulación del virus, para poder lograr que el esfuerzo de la gente durante la cuarentena rinda sus frutos”.