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América Latina es la región con más asesinatos contra periodistas

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Los Ángeles, 8 de marzo. La Comisión de Derechos Humanos de la OEA analizó la situación de la prensa en el continente. | cedoc

El 8 de marzo, en Los Ángeles, una audiencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA abordó el tema de la violencia contra periodistas y comunicadores en América Latina. Veinticuatro organizaciones de todo el continente y también con influencia global –como lo es Reporteros Sin Fronteras (RSF)– denunciaron el número récord de asesinatos de profesionales de los medios de comunicación en la región en 2022 y pidieron a los Estados miembros de la OEA que aumenten su compromiso de proteger a quienes ejercemos este oficio. Si bien Argentina no es uno de los países más afectados por la violencia contra periodistas, le caben algunas de las carencias institucionales que limiten las agresiones y estigmatizaciones de parte de dirigencias políticas, económicas y sociales. 

Pedro Vaca, relator de Libertad de Expresión de la CIDH, indicó que 2022 fue el año más letal contra la prensa. Señaló que esperaba un mensaje honesto, franco y de solidaridad de las más altas autoridades de los Estados: “No puedo decir que no hubo, porque hubo unos tímidos mensajes –aclaró–. Pero lo que sí sonó con fuerza fueron mensajes estigmatizantes contra la labor periodística”. El relator recordó que muchos periodistas que pidieron ayuda al Estado terminaron asesinados. “La tragedia está a un paso”, destacó.

La Red Voces del Sur, integrada por diecisiete organizaciones de la sociedad civil, y las organizaciones Reporteros Sin Fronteras, Justicia Global y Comunicación e Información de la Mujer (Cimac), presentaron a la (CIDH) sus preocupaciones frente a los asesinatos y otros tipos de violencia contra periodistas y las deficiencias de los mecanismos de protección para la prensa en los países en los que se ha implementado. “Solicitamos que esta información se convierta en acciones para detener las graves violaciones a la libertad de expresión y prensa en la región, dado que, desde los Estados, no existe una respuesta efectiva, e incluso son los principales agresores”, señalaron en un comunicado conjunto. No hubo representación de organismos argentinos defensores del derecho a la libertad de expresión. 

Un informe publicado recientemente por las Naciones Unidas reveló que América Latina y el Caribe fue la región más mortífera para los periodistas en 2022, con 44 homicidios, más de la mitad de todos los asesinados en el mundo. México encabeza el triste ranking, con diecinueve asesinatos registrados en 2022. 

Casi la mitad de los informadores víctimas de homicidios se encontraba de viaje, en sus domicilios, en estacionamientos y otros lugares públicos fuera de su lugar de trabajo. Una tendencia al alza durante los últimos años que, según la Unesco, “implica que no existen espacios seguros para los periodistas, ni siquiera en su tiempo libre”.

Las principales causas de los asesinatos fueron las represalias por informar sobre el crimen organizado, los conflictos armados o la cobertura de temas comprometidos como la corrupción, los delitos contra el medioambiente, el abuso de poder y las protestas.

Pese a ciertos avances durante los últimos cinco años, el índice de impunidad de los asesinatos de periodistas sigue siendo extremadamente alto: un 86%.

Además de asesinatos, otras formas de violencia contra los trabajadores de prensa fueron las desapariciones forzadas, los secuestros y las detenciones arbitrarias, el acoso y la violencia en las redes, en particular contra las mujeres periodistas.

La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, instó a las autoridades a “redoblar sus esfuerzos para poner fin a estos crímenes y garantizar que sus autores sean castigados, porque la indiferencia es un factor importante en este clima de violencia”.