En un contexto de guerra en el que la mayoría de los análisis asoman como lineales, hay un hecho –insignificante para el mundo pero de relevancia para el círculo rojo de la Argentina–, que rompe con ese pensamiento binario: el Gobierno está por autorizar una transacción que por un lado beneficia a una empresa de origen catalán y de capitales chinos, y que por el otro tiene el beneplácito de una empresa de capitales estadounidenses.
La desinversión que la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) le exigió a Disney tiene un desenlace inminente: MediaPRO, dueña de los derechos de la Liga española, se quedará con la mayoría de los 11 “contenidos fundamentales” que marcó el organismo estatal en el dictamen que dio a conocer el 27 de diciembre, tras varios años de demoras y cajoneos.
La firma fundada por los catalanes Tatxo Benet y Jaume Roures en la que aterrizó el Orient Hontai Capital con la compra del 53,5% del paquete accionario en 2018 tomará el control de las tres señales básicas de Fox, que dejarán de transmitir solo archivo y empezarán a ofrecer algo más seductor: de acuerdo a lo que estipuló el fallo de diciembre de la CNDC y de lo que ahora está casi aprobado, en esas pantallas se podrán ver la Copa Libertadores, la Champions League y la Fórmula 1 –los eventos más taquilleros de la lista de “contenidos fundamentales”–, pero también la NFL (fútbol americano), la MLB (béisbol), la UFC (artes marciales mixtas), la WWE (lucha libre), el Premier Boxing Champions, la Liga ACB de básquet, el World Rugby Seven y torneos del ATP 250 de tenis.
El plan de Disney no salió como esperaban en las oficinas del holding estadounidense, pero tampoco todo lo mal que calcularon en algún momento. Hubo un “control de daños” que ahora se observa nitidamente.
Con una histórica relación que la une con MediaPRO, ya sea por relaciones personales entre sus directivos o por los negocios que comparten en diferentes países del mundo, la multinacional del Ratón Mickey hizo ajustes con respecto al ofrecimiento inicial, que la Comisión había considerado “insuficiente”, y habilitó el desembarco de un nuevo actor en el negocio del deporte televisado.
La aprobación general ya es un hecho. Solo restan detalles y revisiones que todavía se están puliendo, casi todas centradas en un aspecto: cuánto durará la transición y en qué mes Disney se desprenderá de las señales en cuestión.
Más allá de las internas que existen en el Gobierno –el ministro Matías Kulfas era más proclive a la aprobación inicial, mientras que el secretario de Comercio Interior Roberto Feletti más reticente–, el dictamen que se conocerá en las próximas semanas no tuvo mayores reparos de ninguna parte. Se lee en el borrador del dictamen, al que accedió PERFIL en forma exclusiva: “Esta CNDC concluye que IMAGINA (MediaPRO) reúne integralmente los requisitos establecidos (...) y valora en forma positiva la experiencia que posee en la gestión de derechos audiovisuales deportivos en España, lo cual aumenta sustancialmente la probabilidad de que se transforme en un competidor efectivo y vigoroso”. El pronóstico ahora tiene que cumplirse.
