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Larreta cree que competirá con Macri

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Ex sociedad. Rodríguez Larreta y Macri con el gabinete porteño. | NA

“La interna será contra Mauricio”. Contra lo que creyó hasta hace un par de semanas, Horacio Rodríguez Larreta se terminó de convencer de que la batalla final por la candidatura presidencial en Juntos por el Cambio la disputará con Mauricio Macri.

Colaboradores muy allegados al jefe de Gobierno porteño estiman que esa creencia se terminó de consolidar tras el último encuentro que ambos tuvieron a solas a mitad de septiembre, en la casa del ex presidente.

Larreta jura que Macri no le blanqueó en privado sus intenciones, por más que en público el fundador del PRO insiste –cada vez de manera más sinuosa- que él jugará para apoyar la candidatura que mejor refleje “el cambio” y que “no necesito una revancha”, como acaba de decir en España.

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Pero el convencimiento larretista parte de señales dobles que no se exponen a simple vista. Unas las percibe por conocimiento personal de su ex jefe político. Otras, de lo le llega de una parte del círculo que los rodea y aún comparten, en ciertos casos puntuales.

Ante esa certeza, comenzó a rediseñar ciertos matices de su estrategia de instalación electoral. Hacia afuera, Larreta aceleró mayor firmeza ante las protestas docentes y, sobre todo, frente a las tomas de edificios escolares, ratificando que por las cuestiones educativas pasará una de sus banderas proselitistas. La apertura de las escuelas porteñas durante la pandemia fue uno de los caballitos de batalla de las legislativas 2021.

Cristina, la mejor aliada de JxC

Ese endurecimiento comienza a extenderse con los cortes piqueteros, como ocurrió el jueves 29 al despejar con la infantería de la Policía de la Ciudad la interrupción de la autopista 25 de Mayo. Al mismo tiempo, se garantizaba que el acampe en la 9 de Julio no interrumpiera el metrobus ni el tránsito lateral.

Hacia adentro también ha dado pasos en el mismo sentido. A su proclama pública de que no hay mayor halconismo hoy que buscar diálogos y acuerdos, internamente la traduce en un nivel de rosca política que no sabe de pausas.

Varias de ellas se vinculan a este nuevo escenario que imagina Larreta en JxC. Hubo, por ejemplo, salidas e ingresos en su equipo de campaña, como ya anticipó Ezequiel Spillman en este diario.

También decidió empezar a ahogar a quienes se mantienen en la indefinición respecto a si lo apoyan decididamente en su carrera hacia la postulación presidencial. Las miradas están casi todas dirigidas al vasto territorio bonaerense, donde han florecido aspiraciones PRO de todo tipo y color.

Ante la presunta candidatura de Macri, que para Larreta será un hecho, tiene la convicción de que Patricia Bullrich se bajará de la competencia. No tanto por la voluntad de ella sino más de quienes política y financieramente la respaldan, que serían casi los mismos donde abreva el macrismo, según las especulaciones porteñas.

Reactivación de la épica

Del GPS larretista obviamente no queda fuera la otra pata central de JxC: el radicalismo. Para disputarle a Macri la candidatura presidencial imagina un acuerdo institucional con la UCR para que aporte el lugar de la vicepresidencia. Intuye que si Facundo Manes no acepta el convite tal vez sí lo haga el gobernador correntino, Gustavo Valdés.

De ese posible entendimiento con los radicales no estaría ajeno el destino de la Ciudad de Buenos Aires, donde el centenario partido se agrupó detrás del senador Martín Lousteau, que ya cuenta con oficina propia en la sede porteña de la calle Uspallata. Se encienden luces de alerta en torno a Jorge Macri, el ex intendente de Vicente López “importado” por Larreta como ministro de Gobierno y posible sucesor en la Capital.

Más que nunca, la idea larretista como estrategia electoral es a partir de ahora armar un gran frente para ganarle la interna a Macri y despejar cualquier tutela que el ex presidente pretende tener si la oposición vuelve al gobierno en 2023. Ello contaría además con la validación de Elisa Carrió, una socia tan minoritaria como ruidosa.

La batalla opositora amaga con una nueva temporada de altas intrigas.