El cuerpo de marines, que forma parte de la Armada de los Estados Unidos, acaba de admitir que durante más de setenta años se identificó erróneamente a uno de los hombres protagonistas de la famosa foto de la bandera estadounidense izada en el monte Suribachi de la isla de Iwo Jima, en Japón. La foto fue tomada el 23 de febrero de 1945 por el fotógrafo de Associated Press Joe Rosenthal. Ganó con ella un premio Pulitzer y se volvió una de las más famosas de la Segunda Guerra Mundial, tal vez podría decirse que del siglo XX.
En la foto de Rosenthal hay seis hombres, y aquel cuya identidad estaba en duda es uno que casi no se ve, porque en gran parte está cubierto por el segundo soldado empezando por la derecha. Hasta hace pocos días se pensaba que ese hombre era el soldado Rene Gagnon. Tres historiadores demostraron que en cambio se trata del cabo Harold Keller, originario de Iowa.
Los tres historiadores –Stephen Foley, Dustin Spence y Brent Westemeyer– demostraron que el hombre fotografiado es Keller usando viejas fotos sacadas durante esos días en Iwo Jima y haciendo una serie de análisis que no fueron explicados detalladamente. Dada la importancia histórica de la foto, el descubrimiento de los tres historiadores fue analizado y confirmado por un consejo de investigación del cuerpo de marines, con el que colaboró incluso el FBI. El miércoles pasado los marines publicaron un comunicado donde hablan de eso, agregando que “prescindiendo de quien se encuentre en esa foto, cada marine que puso un pie en Iwo Jima colaboró de algún modo para que ese resultado fuera posible y será siempre parte de la historia”. Cosa que es una absoluta mentira, pero que hay que decir para dejar a todo el mundo conforme.
Keller murió de un paro cardíaco en 1979, a los 57 años. Los marines comunicaron el descubrimiento a su hija, quien en diálogo con NBC News dijo que estaba feliz de la noticia y que él no hablaba mucho de la guerra, salvo del hecho de haber sido herido en un hombro. Pero en su casa, Keller tenía una foto –también de Rosenthal– en la que se veía a dieciocho soldados en el monte Subirachi de Iwo Jima, con la bandera estadounidense ya izada.
Al comunicar el error, los marines subrayaron que Gagnon, también fallecido en 1979, tuvo un importante rol en Iwo Jima, colaborando en las operaciones para izar tanto la primera como la segunda bandera.
Efectivamente, antes del momento inmortalizado por Rosenthal hubo otro izamiento de bandera, pero aquella resultó ser demasiado pequeña y decidieron sustituirla por una más grande.
Cabe recordar que Clint Eastwood dedicó un film al famoso izamiento de la bandera en el monte Suribachi (La conquista del honor, 2006). Eastwood se centra en el destino de los retratados en la foto de Rosenthal, que sin proponérselo expresamente había conseguido plasmar un símbolo de victoria. Algunos de los que habían participado en ella morirían poco después y nunca sabrían que habían sido inmortalizados. Pero tres de los supervivientes se vieron convertidos en “fenómenos”, obligados a abandonar la acción para ser expuestos como espectáculo de feria con el fin de generar conciencia en una sociedad que no quería saber nada de la guerra y conseguir la compra de bonos con los que seguir financiando la lucha. Pero ellos no tenían interés en ser vistos como héroes, solo querían estar en el frente. Aquel film se basó en el libro Banderas de nuestros padres, de James Bradley y Ron Powers (James Bradley es hijo de John “Doc” Bradley, uno de los hombres que izó la bandera del monte Suribachi y cuya identidad nunca fue puesta en duda).