Está pasando un momento formidable. Es fundamental que en River el arquero esté bien. Además sus
grandes rendimientos sirven para cosechar puntos, porque a veces uno puede tener una buena
actuación pero el equipo no gana. Si yo en Italia atajaba dos penales, pero mis compañeros erraban
tres, no hubiera servido de nada. En su caso las victorias de River muchas veces se apoyan en él. Y
eso lo agiganta.
Su presencia en el área y la sobriedad con la que juega lo destacan. Cuando la situación se
le presenta difícil, la resuelve con tranquilidad. A veces le critican que arriesga mucho con la
pelota en los pies, pero también es cierto que lo presionaron respecto de ese tema.
No podemos establecer cuál es el techo de Carrizo. Ataja en un arco difícil, quizá el más
difícil de la Argen tina, donde la presión se vive día a día. Y si bien es un arco distinto, le
llegará pronto la posibilidad de adueñarse del de la Selección, más allá de que hoy ese lugar esté
bien ocupado por el Pato Abbondanzieri.
*Arquero de River en 1983/88 y 1993/9.