En la edición del domingo 20 fue publicado un texto en la página 54, sección Universidad, que ha motivado quejas de los cuatro firmantes, en particular con críticas a la forma en la que fue editado.
El título de ese espacio fue “Ciencias Exactas, mucha investigación y pocos alumnos”, con una bajada que señalaba: “Un reciente libro refleja las ventajas y desventajas de la facultad más pequeña de la UBA. Tiene la menor tasa de inscriptos, pero presenta la relación más alta de estudiantes por presupuesto. Una gran cantidad de docentes con dedicación exclusiva para cada vez menos egresados”. El texto es un conjunto de fragmentos de Historia de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, escrito por Eduardo Díaz de Guijarro, Beatriz Baña, Carlos Borches y Raúl Carnota, y editado por Eudeba.
En un correo enviado al jefe de Redacción, Javier Calvo, los autores (a quienes el editor de la sección adjudicó la firma de lo publicado por este diario) expresan: “Nos sorprendió de-sagradablemente que la nota publicada estuviera encabezada por un título y una bajada que no son de nuestra autoría y que, junto con una particular selección de fragmentos y sin señalar la temática del libro, tergiversara su contenido. No sabemos por qué se afirma allí que la FCEN es ‘la facultad más pequeña de la UBA’, cuando existen otras cuatro que son menores, y que tiene ‘cada vez menos egresados’, lo que tampoco es cierto. Esas dos afirmaciones no sólo no figuran en el libro sino que su falsedad es fácilmente verificable con sólo consultar las estadísticas que publica periódicamente el rectorado de la Universidad de Buenos Aires. El título y la bajada, lo mismo que la selección arbitraria de fragmentos del libro, convierten la nota en un artículo de opinión del que aparecemos erróneamente como autores y que a través de datos equívocos parece sugerir que la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales fuera una institución con un presupuesto excesivo con relación a su rendimiento”. Finalmente, piden correcciones en la plataforma digital y una fe de erratas en esta edición en papel.
El editor de la sección Universidad, Rodrigo Lloret, respondió a este ombudsman: “El fondo de la crítica que nos hacen es que estaríamos en contra de la educación pública. ¿Cómo vamos a cuestionar la educación universitaria estatal, si Universidad es la única sección de un diario nacional donde todas las semanas se publican notas, carreras, información y debates sobre universidades públicas de todo el país?”. Lloret expone en varios puntos la posición de su sección, que puede sintetizarse (el texto es excesivamente largo) así: “Nosotros somos los que titulamos y destacamos la bajada. La sección no es un house organ de ninguna universidad, ni pública ni privada” (…) “Cuestionan que dijimos en la bajada que la FCEN es ‘la facultad más pequeña de la UBA’. Es cierto, es un error, pero me parece que no tan grave” (…) “Cuestionan que dijimos en la bajada que tiene ‘cada vez menos egresados’. La nota dice: ‘La matrícula es escasa con relación a las necesidades del país’” (…) “No cuestionan la selección de la nota por ser falsa, sino porque ‘es arbitraria’. Pero ellos, y el jefe de Prensa de Eudeba, a quien contactamos para hacer la nota luego de ver el libro, sabían que íbamos a publicar un fragmento, como se aclaró en la nota publicada” (…) “Dicen que la edición de la nota ‘parece sugerir que la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales fuera una institución con un presupuesto excesivo con relación a su rendimiento’. Y éste es el punto central, no decimos eso, decimos lo que ellos dicen: que tiene la mayor tasa de presupuesto por alumno, mucho presupuesto pero pocos alumnos. Pero insisto: no está mal que así sea. Sino todo lo contrario”.
Escuchadas ambas campanas, este ombudsman revisó las estadísticas de la UBA que confirman asertos de los autores del libro. Exactas es, efectivamente, una de las menos concurridas, pero Agronomía, Veterinaria, Farmacia y Odontología tienen menos alumnos: lo publicado no es un error menor; la cantidad de ingresantes a sus carreras no muestra un deterioro significativo; es alta su relación estudiantes por presupuesto; no es correcto que cada vez tiene menos egresados.
Debo puntualizar, así, algunas cuestiones que no respondieron en este caso a las mejores prácticas de PERFIL: el título y la bajada sí pueden ser interpretados como una crítica al presente de esa facultad; no fue correcto dar a los autores del libro la firma tal como se publicó; es cierto que títulos, bajadas y modos de edición son decisiones de los editores, pero guardando sumo cuidado en su administración para evitar que esa arbitrariedad perjudique a fuentes y lectores.
