Silvina Luna, modelo y ex participante del programa Gran Hermano, sigue hospitalizada en terapia intensiva en el Hospital Italiano de Buenos Aires. Según se informó desde el nosocomio se informó que su estado de salud es delicado, tras sufrir complicaciones derivadas de una operación realizada por el cirujano Aníbal Lotocki.
Según indicó el periodista Ángel de Brito, Luna "está sedada y con respirador", aunque se encuentra acompañada por su familia. "Está sufriendo un montón hace mucho tiempo", agregó el conductor.
Luna sufre de una insuficiencia renal a consecuencia de la hipercalcemia, una enfermedad que provoca desequilibrios en los niveles de calcio en el organismo.
Antecedentes
En 2011 la modelo se sometió a una intervención del tipo estética realizada por el cirujano Lotocki. Según se publicó en su momento, la introducción de una sustancia tóxica en su cuerpo (polimetil metacrilato) le provocó hipercalcemia e insuficiencia renal.
A partir de este cuadro, Luna debe realizarse diálisis tres veces por semana durante cuatro horas. Actualmente, necesita un trasplante de riñón para que su vida pueda volver a la normalidad.
"Una de las personas que se ofreció a donarme un riñón fue mi hermano, pero a mí todavía me da cosa hablarlo. Yo sé que él está ahí, pero depende de muchas cosas", había asegurado la modelo.
¿Por qué está internada?
Perfil.com charló con el nefrólogo Jorge Luis de La Fuente, encargado del servicio de Nefrología del Hospital Privado de Córdoba. Para el médico, el de Luna es un caso poco frecuente, pero en los servicios de nefrología de los hospitales grandes hay casos similares. La enfermedad renal crónica en todo el espectro de su gravedad afecta a mas del 10 % de la población, la mayor parte de las veces como consecuencia de enfermedades prevalentes como la diabetes y la hipertensión. Lo más significativo es que puede ser diagnosticada precozmente con análisis simples de sangre y orina y su tratamiento puede evitar la llegada a etapas avanzadas que requieren de diálisis o trasplante renal.
La internación actual podría ser una intercurrencia infecciosa que ha requerido de cuidados intensivos, según se ha comentado en los medios.
En cuanto a su enfermedad renal, según lo publicado, se habría originado en intervenciones en las que se le habría administrado metacrilato, una sustancia que puede desencadenar una reacción inmunológica que puede provocar hipercalcemia.
En esa situación, la eliminación continuada de cantidades excesivas de calcio por vía renal además de generar la formación de cálculos en la vía urinaria, provoca la precipitación de cristales de este material en el riñón, dañando su estructura y llevando finalmente a la insuficiencia renal crónica en estadios avanzados.
Silvina Luna se sometió a intervenciones quirúrgicas que dañaron su salud | Caras (perfil.com)
¿El trasplante es la solución?
Sin dudas el trasplante renal es el major tratamiento de la insuficiencia renal extrema. Para ello es necesario que el paciente se encuentre en condiciones médicas que lo hagan una opción viable. Primero deberá superar la actual situación crítica. Según se comenta tendría además que completar el tratamiento de un proceso infeccioso previo generado por micobacterias, un patógeno difícil de erradicar y que require tratamientos prolongados, para por fin llevar adelante las evaluaciones necesarias para poder realizar el trasplante renal.
¿Corre riesgo su vida?
La actual situación es de altísimo riesgo vital. Aún fuera de este evento agudo grave que la tiene en la unidad de cuidados críticos, la enfermedad renal terminal se asocia a un aumento del riesgo cardiovascular de aproximadamente 100 veces mas que el de la población general con función renal normal. Además la enfermedad renal incrementa el riesgo de otras complicaciones como las infecciones y las fracturas entre otras.
¿Puede recibir cualquier riñón?
Una vez superadas las complicaciones y ya en condiciones de trasplante, podría recibir cualquier riñón inmunológicamente compatible. Este podría provenir de la donación de pacientes fallecidos, a través del sistema de distribución que depende del INCUCAI o de un donante vivo que cumpla con los requisitos legales que la ley establece y que sea médicamente apto según la evaluación de un centro de trasplantes. En el caso de los donantes vivos, además de la ventaja que puede significar la mayor compatibilidad que a veces se puede encontrar, la principal ventaja son los menores tiempos de espera para poder llevarlo adelante.
Cómo es la vida post trasplante
El trasplante permite une mejora en la calidad y tiempos de vida de los pacientes. Debido a que el órgano trasplantado es extraño para el sistema immune del receptor, este debe recibir inmunosupresión para evitar el rechazo, es decir que el sistema immune se active contra el órgano trasplantado y lo dañe. Debido a esto los pacientes que viven con un trasplante tiene un incremento en el riesgo de infecciones, riesgo que puede ser atenuado por medidas de prevención, permitiendo así a los pacientes llevar adelante una vida normal.
En relación al donante vivo, si bien existen riesgos, estos son de muy baja frecuencia y mas allá de los propiamente relacionados a la cirugía, parecen concentrarse en algunas características genéticas asociadas a factores raciales o a enfermedades familiares principalmente.