Perfil
CóRDOBA
Salud

Diego Cardozo: “Córdoba podrá analizar dos mil muestras diarias de coronavirus a partir de la semana que viene”

El Ministro de Salud es el encargado de coordinar las acciones de hospitales públicos y sanatorios privados. Preparan un hospital de campaña en el San Roque. “El desafío es que cuando la situación se agrave, el sistema de salud no se sature”, asegura.

Cardozo cba
TEXTUAL. “El objetivo en este momento es organizar el sistema sanitario provincial, tanto público como privado, con el objetivo de lograr una respuesta integral”. | Cedoc Perfil

Los días de Diego Cardozo parecen tener mucho más de 24 horas y aún así da la sensación de que no le resultan suficientes . Su agenda es intensa desde que explotó en el mundo la crisis generada por el coronavirus. En su día a día se mezclan reuniones con directivos de hospitales públicos y privados, fuerzas de seguridad, ingenieros, representantes de obras sociales, funcionarios públicos de los diversos estamentos, contactos con la prensa y la lista sigue. Desde el momento en que se aprobó en Córdoba la ley de emergencia sanitaria provincial, el ministro oriundo de la localidad de Suncho Corral en Santiago del Estero, quedó como el responsable de “dirigir y organizar el sistema sanitario provincial público y privado, con el objeto de lograr una respuesta integral y efectiva a la presente situación de emergencia”.

En otras palabras, Cardozo es el encargado de coordinar las acciones en todo el sistema de salud de Córdoba, tanto público como privado. El funcionario dialogó con PERFIL CORDOBA y explicó en qué situación se encuentra la provincia y adelantó las medidas que están tomando desde El Panal para cuando lleguen días más críticos para el sistema sanitario.

“Estamos en una fase de contención. En terminología médica eso significa que utilizamos procedimientos especiales para detectar en forma precoz a todos los casos importados que lleguen con esta patología, aislarlos en forma segura y garantizar el aislamiento de la persona para que no se generen los contagios”, explicó. “El hecho de que tengamos casos que son importados o por contactos significa que aún no pasamos a la fase de mitigación, que es cuando el virus ya está circulando y uno tiene que dar una prestación asistencial. En esa etapa, al tener casos autóctonos la gente empieza a demandar otras prestaciones al sistema de salud”, agregó. En ese momento no se puede hacer hincapié en la detección precoz y en la prevención sino que la gente demanda acciones terapéuticas y de asistencia. “Allí no hay circulación comunitaria del virus, pero sería irresponsable pensar que esto no va a llegar”, dijo.

—¿Cómo se prepara Córdoba para esa fase de mitigación?

—Estamos preparándonos para lo que puede ser una fase de mitigación. El ministro Ginés González García dijo que cree que el pico de la patología llegará a fin de abril o a principios de mayo. Por eso tenemos un comité de acción sanitaria con el que se hizo una distribución de los recursos de forma tal que nos permita llevar un plan de contingencia en todo el territorio provincial. Son instituciones donde nos podemos dividir ediliciamente entre lo que tenga que ver con la demanda habitual y lo que no, porque la gente va a seguir teniendo apendicitis, infartos, crisis de asma. Uno se tiene que preparar para las dos cosas. Suele pasar, cuando no hay un plan de trabajo, que los sistemas asistenciales se saturan con la patología epidémica y restringe el acceso a las patologías habituales a la gente. Entonces, termina muriendo más gente de la patología habitual que de la patología epidémica. Estamos preparando el sistema asistencial para recibir a los infartados, a los politraumatizados, a los embarazos o personas con ACV. Abrimos el Hospital Elpidio Torres para seguir atendiendo la demanda habitual. Por dar un ejemplo: tenemos 13 mil nacimientos por año solo en la ciudad y tenemos que darle garantía a esas madres de que tengan un parto como corresponde. Hay que garantizarle a los cordobeses que van a acceder a la mejor prestación de salud.

—¿Cómo es el trabajo en el interior?

—Destinamos seis hospitales que también se van a dividir ediliciamente: los hospita les de Río Cuarto, Villa María, San Francisco, Jesús María, el Domingo Funes y el de Mina Clavero. En Capital hemos nucleado los trabajos en el Polo Sanitario, porque allí podemos complejizar nuestros hospitales, como el Rawson, referente en la materia. En tanto que al San Roque se le va a añadir un proyecto que es un hospital en block que va a contar con 75 camas. De esta manera, en el corto plazo va a tener 175 camas críticas y 150 camas comunes. En esa institución prácticamente se quintuplica la cantidad de camas críticas las cuales tendrán respiradores y monitores. Nosotros calculamos que la estadía en cama de cada paciente será de ocho a 10 días y por eso tienen que tener todos los servicios y el monitoreo del paciente.

—Usted coordina las acciones del sector privado también. ¿Cómo está respondiendo este sector?

—Venimos manteniendo reuniones permanentes con la cámara que los nuclea y unificando criterios de acuerdo a los protocolos de acción. Todos se han puesto a trabajar y están adecuando sus instituciones. El Sanatorio Allende y el Privado han montado carpas en el estacionamiento. Una de estas carpas tiene 14 consultorios donde se atenderán a los pacientes febriles. El Italiano está con trabajos similares. Todos pusieron a disposición sus camas críticas, sus laboratorios, sus recursos. Con muy buen tino hoy estamos preparando la unificación del sistema para dar respuesta a una demanda que puede ser alta de acuerdo a cómo evolucione la patología.

—Se cuidan mucho de dar a conocer el lugar donde se registran los casos de coronavirus. ¿Eso es por normativa?

—Sí, es por normativa y para resguardar la identidad del paciente. Hay veces que son en lugares chicos y los identifican enseguida. Evitamos la estigmatización. Hemos visto que pacientes recuperados han recibido amenazas cuando quisieron volver a sus hogares.

Reactivos, al caer.

Uno de los temas que la sociedad exige con más fuerza al Gobierno nacional es la federalización de los análisis, ya que sin el viaje a Buenos Aires los tiempos se aceleran y por consiguiente las detecciones son más rápidas y con menos posibilidades de contagio. En esta provincia, el Laboratorio Central está capacitado para hacer los análisis para detectar COVID-19. Respecto a cuándo podrían estar haciéndose análisis en esta ciudad, Cardozo adelantó que después del 25 de marzo podrían realizarse los primeros.

“La gente del Laboratorio Central ya tuvo una capacitación online con la gente del Malbrán. Apenas ellos envíen los reactivos podremos empezar a analizar. Estimamos que después del 25 de marzo llegarían los reactivos”, consideró el ministro. “El Laboratorio Central no tiene solo aparatología de primer nivel, sino que está validado por la OMS. Creemos que hoy se podrían analizar unas mil muestras y si sumamos a los privados podremos analizar hasta dos mil muestras diarias”.
 

“Estamos preparando al sistema de salud”
 

El ministro Diego Cardozo consideró fundamental el hecho de que la gente cumpla con el aislamiento obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional. “La gente debe ocuparse de llevar adelante las recomendaciones, ya que tanto las autoridades del Gobierno provincial y nacional se nutren de las opiniones de los expertos antes de tomar medidas”, indicó. “Los que pueden, quédense en su casa. Tenemos que preparar el sistema de salud para lo que puede requerir. Es la mejor manera de disminuir posibles contagios. Es la barrera más importante que tenemos, la de mantener el distanciamiento social para que el virus no pueda avanzar”, sostuvo.