Perfil
CóRDOBA
JUNTOS POR EL CAMBIO

Duro contraataque de Pretto al pedido de desafiliación del PRO

El actual candidato a viceintendente de Daniel Passerini trata de “imprecisa y vaga” la denuncia presentada para expulsarlo del partido. Además, califica de “escurridizas y cobardes” las decisiones que tomaba el PRO, “muchas veces a espaldas de mi persona, que era el presidente del partido”.

Duro contraataque de Pretto al pedido de desafiliación del PRO
El expresidente del PRO, Javier Pretto, realizó un fuerte descargo ante el pedido de desafiliación presentado tras su pase a Hacemos Unidos por Córdoba | Redes sociales

El expresidente del PRO, Javier Pretto, realizó un fuerte descargo ante el pedido de desafiliación presentado tras su pase a Hacemos Unidos por Córdoba. Actualmente, Pretto es el candidato a viceintendente de esa fuerza política para las elecciones del 23 de julio, junto a Daniel Passerini.  

La denuncia fue presentada por María Lucrecia Bustos Aldonza (afiliada al PRO) y allí se sostiene que la decisión de Pretto “nos han infringido, como partido, daños irreparables en un momento álgido como lo es el de la definición de candidaturas. El desconcierto en que nos sumió a quienes formamos parte de este partido y nuestra imposibilidad de brindar respuestas, por la escurridiza y cobarde conducta de quien aquí se denuncia, no puede ser impune”. 

En otro párrafo del pedido de desafiliación, la denunciante expresa que Pretto no ha dado “razones de su decisión”. En ese sentido, el dirigente señala que “quien debería dar razones de su conducta desplegada, tales como negociar a espaldas del Presidente, vicepresidente tercero y tesorero, quienes conformábamos la mesa chica de decisiones diarias, asumir compromisos de candidaturas y ofrecimientos de otras a dirigentes sin la más mínima consulta y validación de tales acciones con la mesa chica de conducción partidaria señalada, es justamente el señor vicepresidente Oscar Agost Carreño (NdE: en la actualidad presidente del partido), dado que su conducta sí es compatible con una actitud “escurridiza y cobarde”.

Pretto califica a la denuncia como “imprecisa y vaga”, y añade: “La denunciante asegura que la coalición Hacemos Unidos por Córdoba tiene como columna vertebral al peronismo, como si fuera incompatible tal expresión política con Juntos por el Cambio”. 

Javier Pretto

Pretto pone de relieve que “la coalición política a la que pertenece la denunciante está plagada de peronistas, entre los más conocidos Miguel Pichetto, Emilio Monzó, Diego Santilli, Luis Juez, Joaquín de la Torre y Daniel Asef, entre otros tantos. Por ello, no se explica esa manifestación de ‘columna vertebral de peronistas’ como incompatible o dañosa cuando su coalición está integrada de múltiples dirigentes de ese origen con muchos de los cuales conservando hasta su afiliación al peronismo”. 

En otro tramo de la extensa presentación, el expresidente del PRO sostiene que “el funcionamiento del partido se fue convirtiendo en franquicial, a tal punto que me fui enterando de muchas de las decisiones que se tomaban por la prensa o por hechos ya consumados, lo que vulneraba aún más la actividad como presidente de la organización partidaria. Se resolvían situaciones y problemáticas típicas de una alianza en mesas y/o reuniones de las que no se me hacía parte, todo avalado por las autoridades nacionales que consentían tales acciones en manos del vicepresidente, en quien había confiado determinadas funciones para ser reportadas a la autoridad natural”.

“Estas conductas sí podrían ser consideradas ‘escurridizas  y cobardes’ tal como lo expresa la denunciante, ya que como manifesté se realizaban a espaldas de los dirigentes que conducíamos el partido y de la mesa chica que se conformó para avanzar en las decisiones que se debían tomar”, añade Pretto.

El cierre de listas, “un verdadero caos”

Pretto también se refiere, en su defensa, al cierre de listas de Juntos por el Cambio. “Las acciones de público conocimiento que sucedieron en el cierre de listas de la Alianza, y el desempeño de las autoridades y candidatos, todos juntos dentro del juzgado en un verdadero caos, con alto riesgo de haberse considerado por las autoridades de la justicia electoral la falta de presentación de listas de candidatos en tiempo oportuno y sin las formalidades de ley, acreditan la falta de criterio político, sensibilidad social y pugna por cargos más que por responsabilidades democráticas dignas de un partido serio”.

Y añade: “Todo ello, sumado a la falta de ética y la ambición por acumular poder en una sola persona, llevó a concentrar los roles de armador de estructura, candidato y apoderado, entre otros roles, en una misma persona”.