Fassi, de Talleres al radar de Macri para la política

La maquinaria de Cambiemos ya activó el GPS rumbo al 2019 y, dentro de la escuadra, particularmente el PRO ya se viene moviendo desde mediados del año pasado en busca de una serie de objetivos, que van desde conservar a la capital cordobesa como uno de los bastiones -pero con porcentajes distintos a los de la sociedad actual, claro-, y en segundo lugar, analizar la estrategia para la Provincia. Y es precisamente dentro del primero donde las aguas comienzan a agitarse en torno al armado con mayoría amarilla, que prefieren algunos de los aliados del presidente Mauricio Macri en territorio mediterráneo.

Desde su concepción, el macrismo se conformó como un espacio que integró a políticos de origen neoliberal, empresarios que empezaron a ir en busca de otros desafíos y la “pata” de los famosos, que en algunos distritos trajo sus réditos. En Santa Fe o La Pampa, el espacio amarillo tiene referencia en Miguel del Sel y Carlos Mac Allister, respectivamente, y en Córdoba, el ala política u ortodoxa se diferencia de los famosos que lidera el ex árbitro y diputado nacional Héctor Baldassi. En ese lote, en el de los que vienen del deporte y no tienen tradición en la política –se suma Eduardo “el Gato” Romero, como intendente de Villa Allende, y Felipe Lábaque, como viceintendente de Córdoba- es donde empezó a tallar desde hace unos meses el nombre de Andrés Fassi. “El Zorro”, que preside Talleres, el escolta de Boca en la Superliga, y que fue sondeado para dar el salto a la arena política.

En octubre del año pasado PERFIL CORDOBA publicó que el management que viene aplicando en el club de barrio Jardín era seguido de cerca, no sólo en Córdoba sino también en los ámbitos del poder nacional. Es más, en aquel momento un operador de la alianza reconoció en off: “¿Vos creés que las escuelitas, las recorridas y toda la prédica que hace del Mundo Talleres termina en el fútbol? Lo de Fassi tranquilamente puede ir más allá de lo deportivo”, sintetizó el hombre. Quien además reconoció que lo medía no únicamente la coalición Cambiemos, sino que también estaba en la mira del peronismo desde El Panal.

Ahora, a meses de aquel rumor, Fassi habría sido tentado para ser uno de los tapados que el PRO ponga a pelear por un casillero con miras al 2019. Conservador, de aceitados vínculos con el empresariado, los medios y la Iglesia en Córdoba, Fassi tiene como primer objetivo terminar el actual mandato en 2021 aunque el nuevo estatuto del club le aseguraría tener las riendas hasta 2025 si lo deseara.

Roggio, Slim y el “Fútbol SA”. Los que están cerca de “El Zorro” reconocen que hoy no tiene un sucesor con chapa y de confianza dentro del club. Cuando llegó a Córdoba el dirigente formado en México, el despacho principal del club estaba ocupado por Rodrigo Escribano, el joven que puso Aldo Roggio para que la entidad empezara a salir del pozo de los torneos federales. Sin embargo, Escribano pudo concretar esto ya con la sombra de Fassi encima y hoy se mantiene en la vicepresidencia 2ª y con un perfil mucho más bajo del que se le conoció. La vicepresidencia 1ª, en tanto, está en manos de Guillermo Carena, histórico asesor letrado del club, familiar de Fassi y también hombre cercano a Roggio, el todopoderoso hombre de la obra pública en territorio mediterráneo.

Es sabido que Fassi aprendió a navegar en estas aguas estando en México, donde al frente del Pachuca estuvo bajo el control de Jesús Martínez, el azteca que a su vez respondió en su momento a Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo, que confió el área de los deportes dentro de sus unidades de negocio al tándem Martínez-Fassi.

Por su parte, en Balcarce 50 están también los que reconocen que el cordobés le puede ser útil a Macri en otro de los viejos sueños del expresidente de Boca: transformar los clubes del fútbol argentino en sociedades anónimas. El mismo modelo que existe en México y en otras ligas del mundo. Para eso, el apuntado en su momento fue el presidente de Boca, Daniel Angelici, hoy en el centro de las críticas por la incidencia en AFA y su rol de operador del Poder Judicial. La relación entre Fassi y Angelici, con los pases cruzados de algunos futbolistas, es óptima y de allí parten algunas de las referencias que a Macri le llegaron del cordobés.

Así, el presidente de Talleres está en condiciones de barajar ambas posibilidades: dar el salto a la política o continuar en el fútbol como uno de los aliados de Macri para la discusión por el Fútbol S.A. El PRO salió de caza, es cierto; pero se sabe, el zorro sabe más por viejo que por zorro.