Provincia y Municipalidad de Córdoba trabajarán en los próximos días en los detalles operativos y técnicos para poner en circulación los títulos que se anunciaron para pagar deudas a proveedores. Se requieren aprobaciones políticas, técnicas del Central y también afinar detalles operativos, por caso, para que Rentas pueda recibir sin inconvenientes el pago de impuestos a través de esos instrumentos. ¿Qué grado de aceptación tendrán esos instrumentos? La respuesta la dará el mercado. PERFIL CORDOBA hizo un primer sondeo con el sector que, a priori, aparece como el principal interesado. Y es que las empresas de obras públicas tienen acreencias con la Provincia por unos $4.000 millones y con la Municipalidad por entre $1.000 y $1.500 millones. Si se recuerda que el título que presentó el gobernador Schiaretti (Docof) es por $9.000 millones y el del intendente Llaryora por $2.000 millones estamos ante un sector que acumula casi la mitad de los valores por lanzar.
Al respecto, Luis Lumello, presidente de la Delegación Córdoba de la Cámara Argentina de la Construcción comentó: “Si bien el bono no es lo óptimo, porque tenemos contratos en pesos y deberían respetarse, en este contexto el bono es el pago posible de deuda pasada. La Provincia nos debe a los contratistas $4.000 millones. Son bonos que tienen la fortaleza que permiten pagar deuda hasta el 29 de marzo de este año. El problema es que las empresas necesitan liquidez y van a perder entre el 25% y el 30%. Los bonos que estaban cotizando hace unos meses en un 85%, como el de Ciudad de Buenos Aires, ahora están en 70% más o menos”.
Pese a esto, considera que el Docof provincial tendría un buen grado de aceptación. No sucedería lo mismo con el de la Municipalidad por algunas de sus características que limitarían su uso y circulación: “El problema que tiene ese bono es que podés pagar deuda hasta diciembre 2018. Y, además, le han puesto un tope de tasa del 40%. Hoy en un país como el nuestro hacer eso implica que no van a tener mercado secundario. No han hecho ningún esfuerzo para tratar que estos bonos sirvan para paliar la situación. No les vemos una sola fortaleza a esos bonos. Las empresas que han sido proveedoras están totalmente disconformes y con intención de cobrar las deudas cruzándose al frente, a la Justicia”, apuntó Lumello y remarcó que en el caso de estos instrumentos “el secreto es que tengan un mercado secundario y la mayor circulación y salida posible. Con la Provincia lo vemos, con los bonos de la Municipalidad no”.
Gestiones para volver
La extensión de la cuarentena hasta el 26 de abril golpeó las expectativas del sector que esperaba alguna señal para volver paulatinamente al trabajo. Por ahora, las obras privadas y públicas en general no quedaron exceptuadas, pese a que siguen las gestiones desde la cámara nacional. Fundamentalmente se apunta a que se apruebe un protocolo de trabajo y sanitario que habilite la actividad con cuadrillas funcionando por turnos horarios.