La discusión electoral anticipa reacomodamientos en el kirchnerismo

En el inicio del año electoral las discusiones hacia adentro del espacio kirchnerista que integra Frente de Todos de Córdoba comienzan a cobrar volumen en torno a dos ejes principales; el tipo de construcción política y territorial que se llevará adelante y el manejo de la estrategia electoral que se adoptará de cara a las elecciones de octubre.

Las disputas arrancan cuando todavía no hay certezas respecto a la decisión que tomará en gobierno nacional en cuanto a la realización o no de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y a un eventual acuerdo electoral entre Alberto Fernández y Juan Schiaretti para unificar listas.

Se trata de dos elementos fundamentales que van a condicionar el rumbo que adoptará el Frente de Todos en los próximos meses. Aun así, los diferentes sectores que abrevan en el kirchnerismo cordobés, quieren llegar al tiempo de definiciones en la posición más expectable posible.

Tironeos

Algunos de los espacios no peronistas cuestionan que la centralidad adoptada por La Cámpora en el manejo de la relación con el gobierno nacional y buscan tender sus propios puentes de llegada a la administración central.

Aunque no hay rupturas, sí se busca tener mayor injerencia en las decisiones y el manejo de los recursos que puedan bajar hacia Córdoba.

“Nadie ha roto relaciones con nadie ni se desconocen liderazgos, pero queremos que las listas representen a un modelo que incluye a los sectores del trabajo y la producción”, explicó uno de los dirigentes del Frente.

Otros sectores del denominado kirchnerismo tradicional, advierten la necesidad de expandir el trabajo territorial y marcar diferencias con el peronismo de Córdoba representado por el schiarettismo, en clara oposición a un eventual acuerdo.

Pese a las discusiones, la mayoría de los consultados admiten que, llegado el momento, se sumarán a la estrategia final que se terminará de delinear desde la máxima conducción del Frente de Todos a nivel nacional.

Mesa gremial

En las últimas semanas viene tomando fuerza la conformación de una mesa sindical que tiene como objetivo ampliar la construcción política en el ámbito gremial de Córdoba y defender la participación del sector en el parlamento que hoy está representada por la banca que ocupa el diputado Pablo Carro.

Tanto Carro, como líder de la CTA, junto a Ilda Bustos de la Unión Obrera Gráfica y Juan Monserrat por el gremio docente de la UEPC, son las caras visibles de una docena de dirigentes sindicales que buscan tener incidencia en el armado electoral.

“Creemos que en este espacio van a converger entre 25 y 30 sindicatos que buscan sumarse al proyecto con representación propia de los trabajadores”, explicó uno de los armadores del espacio.

La mesa se formalizará en las próximas semanas y estará más recostada sobre el albertismo representado en Córdoba por el actual senador Carlos Caserio, que sobre el sector vinculado al kirchnerismo representado por La Cámpora, según adelantaron sus impulsores.

Buscarán tener un mayor protagonismo político y territorial junto a los dirigentes locales que están alineados al proyecto del gobierno nacional.