La oposición calienta el clima: lanza sus críticas en la previa del discurso de Llaryora en la Unicameral

En la previa del discurso de Martín Llaryora en la Legislatura, el arco opositor le pasó varias facturas al gobernador que asumió hace 50 días. Las críticas apuntan a la continuidad del modelo de gestión del PJ en las más de dos décadas en el poder. A su vez, el reclamo se centra en el ajuste a los estatales, la demanda por la inseguridad y la salud pública que advierten está desbordada. Desde el oficialismo salieron al cruce de las críticas opositoras. En su contragolpe, demandaron que “no se siga mostrando la inmadurez política que se ha mostrado hasta ahora”.

Como todos los 1 de febrero, el titular del Ejecutivo cordobés pronunciará su discurso ante la Asamblea Legislativa. De esta manera dejará inaugurado su primer período de sesiones ordinarias de una Unicameral que ya mostró el choque de fuerzas ante una paridad inédita. De todos modos, el PJ se encargó de inclinar la balanza a su favor sumando a tres aliados (dos estables y un líbero) a la hora de sancionar las leyes que generaron polémica al fin del año pasado.

El arco opositor espera a LLaryora con duras críticas que se centran en la herencia del peronismo en el poder. Con sólo 50 días al frente de la administración provincial, el peso del reclamo recae en la continuidad del modelo de gestión del PJ. De hecho, será el primer discurso en el mandato del sanfrancisqueño en la apertura del año legislativo.

“Esperamos menos marketing y, en su lugar, algunas precisiones en materia de seguridad y narcotráfico. Tenemos barrios tomados por la delincuencia, el flagelo de la inseguridad no encuentra límites y el gobierno sigue sin mostrar un plan serio en un tema crucial”, expresó Matías Gvozdenovich, jefe del bloque UCR.

El radical planteó que espera anuncios en materia de salud y educación, en los cuales “el propio gobierno reconoce el fracaso de sus políticas”. Según el opositor, “el sistema de salud está saturado y en crisis como lo reconoce el propio gobierno, pero la culpa no es de los médicos que pasaron de héroes a villanos en unos meses”, advirtió.

En este punto sensible de la gestión, Gvozdenovich demandó precisiones de cómo el gobierno piensa llevar adelante la descentralización en materia de salud que, reiteró, se encuentra saturada en medio de un escenario de alta demanda que se espera en los hospitales públicos a causa de la crisis.

“No le pedimos magia, le pedimos precisiones en materia de seguridad, combate al narcotráfico, salud y educación, las obligaciones primarias de un gobierno, pero que el suyo no pudo resolver en 24 años”, remató.

Más críticas. Entre los halcones de la oposición, el juecista Walter Nostrala apuntó duro en su crítica. “La salud pública en Córdoba está devastada”, aseveró. En esa línea, el titular de la bancada del Frente Cívico lanzó: “En su primer discurso Llaryora pidió un aplauso para los médicos del sector público y a los pocos días les metió la mano en el bolsillo para apagar el incendio de la Caja de jubilaciones y del Apross que el peronismo generó estos 24 años”.

De igual modo, objetó la nueva ley de seguridad. “Aprobaron una ley horrible. La seguridad en Córdoba sigue descontrolada”, declaró. “No me preocupa lo que Llaryora dice, me preocupa mucho lo que Llaryora hace o deja de hacer”, fustigó el opositor.

Ante el discurso del mandatario que, seguramente, planteará el escenario de crisis económica en el país, en el cual Córdoba no es una isla, la banca de izquierda cuestionó el duro ajuste sobre los estatales. “No tenemos ninguna expectativa en que lo que diga y haga Llaryora sea favorable para los trabajadores cordobeses y sectores más vulnerables”, afirmó Luciana Echevarría. 

La legisladora del MST en el FIT Unidad le recriminó al gobernador moverse bajo la lógica empresarial. “Viene actuando como empresario, ajustando brutalmente a los trabajadores con el aumento de los aportes personales, despidiendo a estatales, maltratando a los trabajadores de la salud y exigiendo productividad”, acentuó.

Además, ante el paro general y la movilización del 24, Echevarría advirtió del masivo reclamo dirigido a los gobiernos nacional y provincial. “Sobra la fuerza para enfrentar tanto los ataques de Milei como los de Llaryora”, dijo.

Finanzas. En cuanto a las finanzas provinciales, la parlamentaria de izquierda rechazó de antemano “un nuevo endeudamiento en dólares que tendremos que pagar todos los cordobeses”. Así aludió a la posibilidad concreta de que Llaryora avanzaría en la emisión de un nuevo título en dólares, ante el contexto de ajuste fiscal que plantea el gobierno de Milei.

En este plano, el vecinalista Rodrigo Agrelo le pidió al titular del Ejecutivo provincial que brinde detalles de su plan de gobierno, que “hasta ahora resulta una incógnita”. 

En su demanda, el legislador de Encuentro Vecinal requirió que se rindan cuentas de la situación económico-financiera de la provincia “en toda su magnitud”. Asimismo, Agrelo interpeló acerca de cuál es la estrategia de la administración Llaryora “para pagar la enorme deuda en dólares recibida de Juan Schiaretti”.

Réplica oficialista. En su devolución de gentilezas, el jefe de la bancada Hacemos Unidos por Córdoba, Miguel Sicialiano, cruzó duro al arco opositor. “Hasta ahora, la oposición ha mostrado ser una oposición por la oposición misma”, afirmó el peronista al tiempo que remarcó: “Hasta ahora lo único que hace es criticar y oponerse”. 

La espada oficialista aseguró que tienen “la responsabilidad de gobernar” dada por el voto popular, y para ello “hay que tomar decisiones”. “A quién le puede parecer mal que se controle a una persona que no trabaja o tiene faltas en su trabajo”, expresó Siciliano.

Así buscó refutar las críticas por la aplicación de un nuevo mecanismo de control de desempeño de los agentes sanitarios y de la administración pública, que puso el foco en el ausentismo. “A quién le puede parecer mal que cobre el que trabaja y el que no trabaja que no cobre”, apuntó.

Sobre esa lógica, defendió la implementación de ‘estándares de calidad’ en la atención “en los lugares públicos en la misma manera que los hay en los lugares privados”. 

Al devolver el golpe, el oficialista recalcó que “ser oposición no es criticar todo, también es proponer. Ser oposición también es estar de acuerdo”. Aunque fue más allá en su contragolpe: “Espero que no sigan mostrando la inmadurez política que han mostrado hasta ahora”.

De cara al arranque del año legislativo, oficialistas y opositores retomaron el diálogo tras el receso. Hubo una serie de reuniones para encarar una hoja de ruta de la dinámica parlamentaria. Fuentes legislativas advirtieron que se respira otro clima, no tan de fogoneo, por lo menos en el inicio del nuevo período legislativo. De todos modos, el discurso de Llaryora marcará el pulso del nivel de fuego cruzado ante el choque de fuerzas en el escenario de paridad en la Unicameral.