A partir de este lunes comenzarán a regir en Córdoba una serie de flexibilizaciones establecidas por el Gobierno provincial.
Las medidas se mantendrán en línea con los anuncios realizados por Nación, que tras la dura derrota en las PASO decidió acelerar el proceso de levantamiento de las restricciones impuestas en la etapa más dura de la pandemia y presentar un nuevo modelo sanitario que incluye aforos mucho más permisivos en materia de actividades en lugares cerrados, apertura de discotecas, permiso de ingreso de extranjeros sin necesidad de aislamiento y eliminar la obligatoriedad de tapabocas al aire libre, medida esta que no fue aprobada por la Provincia, pero sí por el Municipio cordobés.
Sin embargo, ayer por la tarde se decidió unificar la estrategia en todo el territorio provincial. El flamante jefe de Gabinete, Juan Manzur, junto a la ministra de Salud nacional, Carla Vizzotti, fueron la voz cantante del Gobierno nacional y argumentaron que las medidas se basaban en el actual contexto sanitario: 16 semanas consecutivas de descenso en el número de casos diarios de coronavirus y 14 semanas consecutivas en reducción de muertes e internaciones, permitían la aplicación de estos nuevos esquemas.
El gran interrogante que desvela a los especialistas en temas relativos a la pandemia, es qué ocurrirá en el corto plazo con el nuevo panorama aperturista y esta especie de ‘despedida de la pandemia’, teniendo en cuenta que la temida variante Delta, la cual fue responsable de nuevas olas de casos en gran parte del mundo, cuenta con circulación comunitaria confirmada.
Para responder a esta serie de interrogantes, PERFIL CÓRDOBA consultó a especialistas que dieron su impresión respecto a futuros escenarios en el corto y mediano plazo.
Jorge Aliaga es físico, investigador del Conicet, exdecano de Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires y actual secretario de Planeamiento de la Universidad Nacional de Hurlingham. Durante la pandemia de Covid-19 se convirtió en uno de los referentes en materia de números y modelos matemáticos. Para Aliaga, la realidad actual muestra “números que son increíbles”. “Están bajando los casos en terapia y fallecidos. El avance de la vacunación funcionó excelente. Las vacunas tienen un impacto claro en lo que está ocurriendo. Cada vez hay más aperturas, más actividades y los casos bajan. La única que se puede llevar ese mérito es la vacuna”, destacó el investigador.
“Vizzotti plantea que puede haber una suba de casos, pero no de fallecidos y entiendo que apuntan a eso. Creo que es una estrategia que contempla un aumento de casos en el futuro, pero no el número de muertes. Hay una idea de retornar a la normalidad, sin embargo cuando relajas mucho sin cuidado, todo conspira. Es difícil predecir qué va a pasar. Creo que si en el país logramos mantener alguna disciplina en cuanto a los cuidados, algo de distancia, tapabocas en lugares cerrados, tener presente el tema de ventilar, la vamos a sacar más fácil”, agregó.
Para el especialista, la cuestión climática puede ser determinante en el corto plazo: “Tenemos una gran ventaja que es estar saliendo del invierno, lo cual implica más tiempo al aire libre, mejor ventilación de lugares cerrados, todo eso en las enfermedades respiratorias, ayuda”. Sin embargo, una de las claves estará en lo que ocurra en los países limítrofes: “Será muy importante seguir lo que pasa con Delta en Brasil. En estos momentos está subiendo en Chile y se abrió la frontera con Mendoza, eso puede tener un impacto en nuestro país a pesar de que cada país presenta una realidad distinta, porque no hemos dado las mismas vacunas. A lo mejor resulta que Sputnik V es mejor o peor que otras frente a Delta, eso aún no lo sabemos, ya que hay todavía muchas incertidumbres por resolver”, completó Aliaga.
Aperturas paulatinas. Nora Glatstein, presidenta de la Sociedad Argentina de Epidemiología en Córdoba, considera que el actual es el momento de empezar a flexibilizar: “Tal vez se podría haber hecho menos abruptamente y tal vez más paulatinamente. Hablamos con mis colegas y no tenemos la sensación de que la pandemia haya pasado o que haya quedado atrás. Si bien el panorama sanitario es favorable, eso no significa que no podamos tener situaciones no deseadas. No podemos decir que no pueda volver a haber un nuevo aumento de casos, porque hay nuevas variantes circulando. El virus está y eso implica que puede generar consecuencias”, señaló Glatstein.
Además, destacó la distancia tomada por Córdoba en algunas medidas: “La Provincia no acató lo del uso de barbijo, eso nos va a ayudar y bastante, pero hay que seguir reforzando otras medidas. Es muy importante que nos vacunemos. Mientras más alto sea el porcentaje, más chico es el clúster, el grupo que puede transmitir la enfermedad. Los padres deben llevar a sus hijos a vacunarse en el momento en que se amplíen los grupos de edad. Estando bien vacunados podemos evitar situaciones indeseables”, agregó.
Inmunidad clave. Humberto Debat es virólogo e investiga dor del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria en Córdoba y miembro del consorcio PAÍS de genómica de SARS-CoV-2 en Argentina. Para Debat, “hay que entender las flexibilizaciones en un contexto epidemiológico favorable”. “Hace cuatro meses que estamos con una baja sistemática, sin modificaciones, sin llegar a un valle, ni a un piso, ni una meseta que indique un eventual comienzo de una tercera ola. El mismo panorama se vive con los datos de mortalidad, en los que vemos una baja permanente con ocupación de UTIs las cuales están en valores mínimos. Esto no es un ‘veranito’, ni siquiera es comparable con las vacaciones veraniegas cuando tuvimos flexibilizaciones en un momento en que había mucha circulación viral. El contexto actual es mucho más favorable”, resaltó.
“Además, hay que señalar que contamos con una altísima preinmunidad luego de una dramática segunda ola que dejó 2,3 millones de casos oficiales, pero el subregistro es muy alto vinculado al circuito invisible del virus. La gente de la UBA viene manejando este tema y se estima que en la segunda ola hubo 12 millones de infecciones. A eso le tenemos que sumar unas 50 millones de dosis aplicadas en la campaña de inmunización. La integración de estos dos factores hace que decenas de millones de argentinos le presenten una dificultad al virus para circular y producir menos infecciones en corto plazo. La combinación genera un excelente contexto epidemiológico”, describió Debat y agregó: “Vemos escenarios similares en Chile y Uruguay; en Brasil es parecido aunque se ven algunos cambios preliminares que podrían indicar inicio de una nueva ola. En Argentina los índices de movilidad son análogos a la prepandemia y eso aumenta los niveles de exposición y favorecen los contagios”.
A la hora de analizar escenarios futuros, el investigador del Inta aseguró que la tercera ola va a llegar: “Vemos que nuestros países limítrofes tienen un porcentaje de predominancia mayor al nuestro y se flexibiliza el ingreso proveniente de esos países, lo que tendrá sus consecuencias. Vamos a ver un aumento en número de infecciones, sin embargo nos va a agarrar con una cobertura de inmunización alta, gran número de infecciones, pocos casos severos, menos hospitalizaciones y muchas menos muertes. En Inglaterra hubo 10 veces menos muertes, con mejor cobertura de inmunización y 50 mil casos diarios. Creo que, hacia el futuro, vemos una situación más benigna que la actual y eso es una muy buena noticia”, completó el profesional.
SITUACIÓN EPIDEMIOLÓGICA EN CÓRDOBA
◆ 75 casos/100.000 habitantes (riesgo medio)
◆ Positividad en testeos: 3.7% (riesgo bajo)
◆ Ocupación de camas críticas: 7,4 % (riesgo bajo)
◆ Mayores 50 años: 97% vacunados —una dosis—, y 84% esquema completo.
◆ Población de 18 a 49 años: el 88% vacunado con una dosis y 56% esquema completo.
