La inseguridad en Córdoba suma un nuevo capítulo con los llamados "naranjitas" como principales sospechosos de una serie de robos en un restaurante de la Avenida Rafael Núñez al 5.600. En los últimos dos meses, los delincuentes ingresaron tres veces al local, se llevaron una moto, herramientas, computadoras, teléfonos, bebidas y hasta helados, tras violentar rejas y alambres.
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"Tengo mucha bronca e impotencia. Ingresaron tres veces en los últimos dos meses. Lo que más nos robaron es la tranquilidad. Es una locura lo que está pasando", contó Ariel, dueño de Don Núñez Bodegón, en diálogo con Perfil Córdoba. Consultado sobre la presencia policial, fue claro: "la guardia urbana es un chiste. A la noche esto es tierra de nadie".
El robo al restaurante no es el único hecho en el que se señala a los naranjitas como responsables. Vecinos de la zona y otros cuida coches los identificaron como autores de otros delitos cercanos, como el robo de autos y el vandalismo hacia los vehículos cuando los propietarios se niegan a pagarles por el servicio de cuidado.
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La inseguridad afecta no solo a comerciantes, sino también a los vecinos de la zona, quienes denuncian que los arrebatos y robos se han vuelto cotidianos. Rodrigo relató el reciente robo de su moto: "la dejé en la puerta de la casa de mi novia. Pasaron unos minutos y desapareció. Todo pasó en menos de 30 segundos. Nunca más apareció la moto".
A pesar de contar con alarmas comunitarias, cámaras de seguridad y patrullajes esporádicos, los ataques suelen ocurrir durante la siesta o la noche, cuando los delincuentes operan con mayor impunidad. "La zona está fuera de control. Esto parece el lejano oeste", expresó un vecino indignado.
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Los robos a vehículos estacionados también son frecuentes. "Amigos dejaron los autos afuera de mi casa y a los 30 minutos tenían todos los vidrios rotos. La impotencia es total", denunció Mateo, quien aclaró que asiste a un gimnasio de la zona todos los días, pero no lleva objetos de valor por miedo a ser víctima de un robo. "Nunca llevo nada. Solo la botella y las llaves. El día que me quieran robar, me dejarán sin zapatillas porque otra cosa no puedo darles".