Tomás Sosa es un joven cordobés de 22 años que se ha convertido en una destacada figura en el mundo del judo, representando a Argentina en numerosas competencias nacionales e internacionales. Actualmente, forma parte de la Selección Nacional de Judo y compite en la categoría Senior (73 kilos).
Todos los meses, Tomás viaja a Buenos Aires durante al menos diez días para entrenar en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD), donde junto a sus compañeros se preparan para las competencias. “Tenemos una muy buena relación entre todos. Muchos chicos son de Córdoba y los conozco porque competimos de chiquitos”, dice Sosa.
En Argentina, y también en Latinoamérica, se organizan torneos que ayudan a conseguir puntos para llegar a competiciones mayores. A nivel nacional, son dos los torneos más sobresalientes: los de apertura y los de clausura. Mientras que internacionalmente están los Open Panamericanos y los Panamericanos.
En el evento de clausura del año pasado, Tomás logró la medalla de oro, y en el de apertura de este año, obtuvo la medalla de plata.
Hace un tiempo, en el Hotel Mónaco de Villa Carlos Paz, se disputó el Open Panamericano de Judo en las categorías, Cadetes, Juniors y Seniors, para obtener puntajes para los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile y los Juegos Olímpicos.
“Nosotros lo que tenemos que hacer es competir durante el año para juntar la suficiente cantidad de puntos y quedar entre los 9 mejores de América”, explica el judoca.
No sólo eso, el año pasado también participó en una gira por Perú y Colombia, donde también obtuvo una buena cosecha de medallas.
No obstante, como ocurre con muchos deportistas en Argentina, Tomás necesita el respaldo de patrocinadores para seguir compitiendo en torneos internacionales. Aunque el país cubre parte de los gastos, no siempre puede financiar todos los viajes de los atletas.
“La Nación no puede cubrir los gastos de todos para llevarnos a competir, actualmente sólo pueden ayudar a tres personas. Entonces, lo que yo estoy viendo de hacer es poder tratar de cubrir mis propios gastos”, señala Tomás.
El judoca, no sólo compite, también es estudiante de la carrera de Nutrición de la Universidad Nacional. “Se correlaciona mucho con el deporte, porque nosotros tenemos que estar bajo dietas muy estrictas para competir”, menciona el respecto.
Y además, para poder solventar sus gastos relacionados al deporte, ofrece clases de judo en el Parque Kempes los lunes, miércoles y viernes, y también, en el Colegio Castel Franco, los martes y jueves. “Es un ejemplo de equilibrio entre el deporte y los estudios”, mencionan sus familiares. Y ponen de manifiesto que el apoyo de empresas sería fundamental para el desarrollo de su carrera en el mundo del judo.
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