Juliana Berardo juega en Estudiantes de Río Cuarto e integra la selección argentina Sub-20. Hace unos días recibió la invitación para probarse en el Barcelona de España.
Julieta Berardo, la jugadora de Estudiantes de Río Cuarto que fue invitada para sumarse al |
CEDOC PERFIL
Los brazos abiertos como volando, la mirada buscando a sus compañeras, y la boca bien abierta llena de un grito de pasión. Así festeja Juliana Berardo sus conquistas tanto con la camiseta de Estudiantes de Río Cuarto como con el seleccionado juvenil Sub-20, donde en el último sudamericano fue la goleadora de la Albiceleste. “Soy la persona más feliz del mundo jugando al fútbol”, declara su amor la artillera oriunda de La Cautiva, localidad que está a 335 kilómetros de Córdoba Capital y que acompaña el andar de su hija exitosa.
En el último certamen con la Selección, donde compartió equipo con las cordobesas Milagros Mina y Catalina Primo, que se disputó en Ecuador el mes pasado, Berardo se destacó. A tal punto que por estas horas vive horas de muchas emociones y toma de decisiones, ya que hace unos días la llamaron de San Lorenzo, River, Urquiza y Boca. La quieren en sus equipos. Además, pronto se tiene que sumar a los entrenamientos del seleccionado de cara a los Juegos Olímpicos de la Juventud. Pero eso no es todo. La alegría y emoción pasa porque en las últimas horas fue invitada a una prueba al poderoso Barcelona de España. La evaluación será en el mes de junio y desde ya el corazón de Juliana late con más fuerza.
Orígenes de un amor redondo
“Me gustó siempre el fútbol. Desde chica miraba con mi papá los partidos de River. Era fanática, a tal punto de saberme todos los apellidos de los jugadores y cuerpo técnico”, le cuenta Berardo a PERFIL Córdoba. La génesis de su pasión inicia allí, pero los orígenes del juego arrancan de adolescente, porque de niña practicaba equitación. Cuando ella tenía 15 años, en su pueblo armaron un equipo femenino de fútbol para un torneo relámpago. La invitaron, aceptó; y ahí arrancó todo. Y todo de manera vertiginosa.
Actualmente tiene 19 años, milita en el Celeste del Imperio del Sur. Pero apenas comenzó a mostrar sus dotes futbolísticas, en el 2015, la citaron por primera vez a la Selección. Participó de un Sudamericano en Brasil, donde salieron subcampeonas. Al retornar, Boca la fichó. “Pero tenía 17 años y extrañaba demasiado, entonces me volví y arranque a estudiar profesorado en Educación Física”. Antes de llegar a Estudiantes, mientras estudiaba jugaba en San Martín de Mackenna.
“Esta última experiencia con la Selección fue linda. En lo personal pude meter goles y se me abrieron un montón de puertas. Siempre es lindo usar la camiseta de argentina. Es difícil explicar lo que se siente, pero es fácil darse cuenta que es la más linda de todas... Ya cumplí varios sueños, me gustaría jugar un mundial y jugar en algún club del exterior profesionalmente”, explica “Cochi”, apodo que le puso su abuela, mientras las ilusiones viajan y viajan desde ese pueblo, que según el último censo no llega a los mil habitantes pero que sueñan en grande. Si no, pregúntenle a Juliana.
Las “desventajas” de practicar el fútbol para las mujeres
En tiempos de lucha de las mujeres por tener igualdad de oportunidades en todo sentido, en el fútbol, por ahora, es una materia pendiente. Tanto en lo económico como en lo deportivo. Y también en lo social. Pero se están dando pasos, a tal punto que en la Liga cordobesa, por ejemplo, se obliga a los clubes a tener su equipo femenino; y la Superliga tiene también un proyecto de similares características a ponerse en marcha.
En ese marco, PERFIL Córdoba le consulto a la cordobesa Juliana Berardo, futbolista del seleccionado juvenil Sub-20, sobre el porqué en Argentina todavía no le da el valor que merece y que sí hay en otros países al fútbol femenino, y ella explicó que por varios factores.
“Por ahí pienso porque no se dan los resultados, y a diferencias de los demás países, ejemplo Brasil, no tenemos el mismo nivel. Necesitamos más apoyo, no es para nada fácil enfrentarse con esas selecciones cuando la mayoría son profesionales. No tenemos ni tiempo de trabajo. En este último sudamericano, tuvimos solo tres meses de trabajo, es imposible lograr cosas así. Por suerte esta nueva directiva está logrando cambios. Los partidos de fútbol femenino se están empezando a tramitar. Ninguna jugadora puede ir a la Selección si no está federada. De apoco va ir mejorando, eso espero”, anheló.
-En Argentina siempre se dijo que “el fútbol es para los hombres” ¿Sentís discriminación por jugar al fútbol siendo mujer?
-No, en mi caso no. Creo que como sociedad estamos avanzando mucho en ese sentido y ahora es normal que las mujeres jueguen al fútbol. En la liga de Río Cuarto se le da mucha importancia al fútbol femenino. En la final entre Estudiantes y Universidad había mil personas, eso es muy lindo para nosotras, que estamos acostumbradas que solo vayan nuestros familiares a ver los partidos.
