Parece ser que la ola de amenazas invadió la ciudad de La Plata y ahora le tocó el turno al vicepresidente del club Estudiantes, Julio Alegre, quien denunció que en setiembre último recibió varios llamados telefónicos de parte de algunos integrantes de la barrabrava del Pincha en los cuales le decían que lo iban a matar.
"Te vamos a matar", aseguró el dirigente que le dijeron y señaló que en las comunicaciones le pedían ademá que renuncie a su cargo en la institución plantense.
El directivo "albirrojo" anunció que estas amenazas se materializaron en el mes de setiembre pasado, días antes de la realización de la asamblea en donde los asociados del club aprobaron la remodelación del estadio de 57 y 1.
Alegre radicó la denuncia correspondiente en la comisaría primera. de La Plata, donde dejó asentado que recibió "varios llamados amenazantes e intimidatorios" en su teléfono celular.
El directivo precisó que en ellas se le decía, entre otras cosas, "te vamos a matar", "vas a tener problemas con la barra" o "la barra ya te va a encontrar".
En su denuncia, el vicepresidente de Estudiantes dejó sentado que la voz que lo amenazaba "le resultaba conocida", aunque no pudo precisar a quien le pertenecía.
Alegre recordó que uno de esos llamados lo recibió el pasado 18 de setiembre, cuando se le dijo textualmente: "ah, entendiste por fin, el sábado es la asamblea y el lunes tenés que renunciar porque la barra no te quiere".
A lo que el dirigente, en tono burlón, le respondió "no sé si alcanzo a renunciar hoy a la noche, pero quedate tranquilo que mañana a primera hora voy y lo hago, así te quedás tranquilo vos y los que te mandan", según comentó en la FM La Redonda.
Alegre, que dijo que en ese momento sintió una especie de "hartazgo y desasosiego", afirmó que "Estudiantes tiene una larga historia de persecuciones y amenazas, algunas bastante recientes", ya que algunos futbolistas también fueron blanco de intimidaciones.
"La causa no ha avanzado decididamente hacia su esclarecimiento", comentó Alegre, y más allá de que se procedió al desgrabado de las amenazas, no se ha podido rastrear desde que teléfono se realizaron.