Karina Medrano, entrenadora de Lanús, es la única mujer que dirige un equipo de Primera División del fútbol femenino de nuestro país. Medrano sabe que el aporte de una mujer en la formación de otras mujeres puede hacer la diferencia. “Conocemos nuestro pensamiento y comportamiento. Si bien las reglas son las mismas, en el terreno del fútbol no somos iguales, ni en lo psicológico ni en ciertas cuestiones de la vida cotidiana. Una jugadora tiene otro trabajo y un jugador no. La mujer estudia y el hombre, por lo general, no va al colegio”, explica Medrano. “El asunto es que actualmente hay muy pocas mujeres haciendo el curso de entrenador. Pero es un círculo de hombres que poco a poco se va abriendo y el avance de la mujer se está dando con más naturalidad”, agrega.
“Hay pocas mujeres que tienen el título. En mi equipo hay algunas jugadoras experimentadas que ya estudiaron y quieren ser entrenadoras. Yo las aliento”, dice Antonio Spinelli, DT del fútbol femenino de Racing. “Es un tema de capacidades, no de género. Cuando haya mayor oferta de chicas entrenadoras, van a empezar a ocupar los lugares. El cambio llegó para quedarse. Hablo del empoderamiento de la mujer y de cómo gana espacios”, agrega.
En los 55 años que tiene la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino se afiliaron 16 mil técnicos, de los cuales solamente 20 son mujeres. Luis Lescurieux, director de la Escuela de Técnicos de Vicente López, de donde egresaron entrenadores como Gallardo, Simeone y Ramón Díaz, cuenta que en los 25 años que tiene la escuela se recibieron unos 2 mil varones y entre 15 y 20 mujeres. “Igual está aumentando la cantidad. Hoy tenemos tres mujeres estudiando, una cifra alta en comparación con años anteriores”, explica.
Además de la falta de oportunidades y de la escasez de mujeres con título de DT, hay otro factor que influye: el poco de reconocimiento. La semana pasada falleció Marcela Lesich, ex entrenadora de Boca, ganadora de premios Alumni y protagonista de 20 de los 24 títulos del club. Fue despedida sin explicaciones en 2016. En ese momento, Orlando Salvestrini, integrante de la comisión directiva, dijo que no era por el desempeño deportivo sino que creían que era mejor tener un cuerpo técnico masculino.
