Las “razones personales” que llevaron a David Trezeguet a Montecarlo (y que ponen en duda su presencia en el partido ante Arsenal) no son otras que una audiencia por el trámite de divorcio con su mujer, la española Beatriz Villalba.
Las “razones personales” que llevaron a David Trezeguet a Montecarlo (y que ponen en duda su presencia en el partido ante Arsenal) no son otras que una audiencia por el trámite de divorcio con su mujer, la española Beatriz Villalba.