Derrotaron a los Chicago Bears por 29-17 y se quedaron con el trofeo Vince
Lombardi. Cada jugador del equipo ganador recibió un
premio de 73.000 dólares. En el entretiempo, se destacó el
show musical de Prince.
El festejo de Tony Dungy, tcnico de Indianpolis. |
AFP
El equipo de Indianápolis Colts se clasificó campeón de la 41ra. edición del Super Bowl del Fútbol Americano al derrotar en la final por 29-17 a Chicago Bears, en un partido jugado en el estadio Dolphins, de Miami, bajo la lluvia y con más de 80 mil espectadores en las tribunas.
Este fue el segundo éxito en la historia del conjunto de Indianápolis, que también se había consagrado en 1970.
De esta manera, el ganador de la Conferencia Americana se quedó con el título y el trofeo Vince Lombardi: hecho en plata con tres kilos de peso, 55 centímetros de alto y que representa a un balón en posición de ser pateado. Además, cada miembro del equipo se hizo acreedor de la nada despreciable suma de 73.000 dólares.
En el clásico espectáculo musical del entretiempo, también hubo un gran ganador: el multifacético rockero Prince, quien ejecutó dos temas de cosecha propia. Uno de ellos fue una versión conmovedora de Purple Rain, en momentos en que el cielo se venía abajo por la cantidad de agua que caía.
Los Colts llegaron a disputar el Super Bowl tras derrotar a los New England Patriots con apretado marcador de 38-34 en la Conferencia Americana, mientras que Chicago había vencido a New Orleans Saints fácilmente 39-14 en la Nacional.
Peyton Manning, mariscal de campo de Indianápolis, fue declarado como MVP, Jugador Más Valioso de la final.
Manning deleitó a todos con 25 de 38 pases para 247 yardas y un "touchdown", lo que confirma al mariscal de campo como uno de los mejores en los últimos tiempos en su posición.
Además, fue la primera vez que llegaron a estas instancias dos técnicos de raza negra, Lovie Smith (Bears) y Tony Dungy (Colts), este último también el primero en levantar el máximo trofeo.
