DEPORTES
Violencia alrededor del ftbol

Los dirigentes tienen responsabilidad penal por los barras y podrían ser juzgados por encubrimiento

Sostienen que su rol no es hacer de policías y terminan siendo cómplices. Expertos explicaron a Perfil.com por qué son parte de un sistema delictivo que opaca cada fecha.

0408barras468ced
| Cedoc

La violencia en el fútbol es una brasa caliente de la que nadie se quiere hacer cargo. Funcionarios del gobierno, jefes policiales y directivos de los clubes deslindan responsabilidades. Los 224 muertos que registra en su historia el deporte más popular de la Argentina y hechos como el encarnizado enfrentamiento entre fracciones de la barra brava de River en el Estadio de Vélez, obligan a que la búsqueda de responsables se transforme en un imperativo.

La semana pasada, este medio difundió la denuncia de que directivos del club de Núñez daban entradas a barrabravas. Pedro Pompilio, presidente de Boca, agregó más leña al fuego de la polémica: deslindó responsabilidades de los directivos en la violencia de los estadios, al remarcar que no tienen tarea de policía. Sin embargo, hay otras voces que señalan que quienes están al frente de las instituciones deportivas, tiene una relación, como mínimo, de encubrimiento hacia los barrabravas.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

" ¿Cómo nos les va a caber responsabilidad a los dirigentes del fútbol en la violencia?", se preguntó el abogado de derechos humanos y periodista deportivo Pablo Llonto.

" La responsabilidad en el ingreso a los estadios, la tienen los clubes. Si esas barras ingresan saltando molinetes, con entradas para socios o de las mil maneras que conocemos que entran eludiendo controles, hay responsabilidad de permitir el ingreso. Por más que no esté Pedro Pompilio en la puerta, es su responsabilidad poner gente para ejercer el derecho de admisión. Ellos tienen que preocuparse, sino lo pueden controlar tienen que comunicar que el partido debe ser suspendido, porque no pueden controlar el ingreso. Pero esto no ocurre", explicó Llonto.

 "Además tienen responsabilidad porque desde hace mucho tiempo le dieron participación a estas barras en la vida de los clubes. Por ejemplo, la barra brava de Boca formó parte de discusión en la vida institucional del club, por más que ahora Pompilio diga que toman algunas medidas. Esto no nació ayer ni el domingo pasado", señaló en conversación con Perfil.com.

"Los dirigentes podrían ser juzgados por encubrimiento, por coparticipación o por coautoría con una asociación ilícita, como lo son las barras bravas que además tienen ramificaciones", explicó el letrado.

Para ofrecer un ejemplo, Llonto se remontó a un hecho sucedido en 1999: "Rafael Di Zeo era socio cuando fueron los hechos de violencia en el amistoso Boca-Chacarita. Se reclamó que fuera expulsado, para demostrar un gesto político. Sin embargo, Mauricio Macri y la comisión directiva no tomaron la decisión de expulsarlo".

El abogado y periodista apuntó contra la dirigencia del fútbol: "Saben bien la cantidad de mafias que actúan en el fútbol pero no han hecho denuncias. Los juzgados deberían estar llenos de denuncias, Tendrían que haber tenido el coraje, dar la cara, pero no lo hicieron".

Falta transparencia. Ramiro Monner Sans es abogado y dirigente de San Lorenzo. Actualmente es vocal por la minoría, la agrupación Progreso Azulgrana. En conversación con Perfil.com, remarcó que "si algún dirigente se vale de hinchas o socios para delinquir o para incidir en la política del club, estamos en problemas".

"El CO.PRO.SE.DE dice que hay que contratar 800 policías, poner las cámaras, el sistema hidrante por si hay algún hecho de violencia o un incendio, organizar un sistema de evacuación y cumplir las respectivas normas municipales o provinciales".

"Si soy dirigente y cumplo con todos los requerimientos técnicos, pero todas las semanas aparecen 200 entradas de protocolo y después esas personas generan violencia, ahí sí hay responsabilidad. Hay un punto en el que podés perder el control. En el caso de River, es sistemático", puntualizó.

Monner Sans tiene ideas para transparentar el fútbol. "Proponemos medidas técnicas, con un sistema de computación es sencillo saber cómo se llaman y cuál es el número de documento de las miles de personas que están en un estadio. Las entradas deben ser vendidas en puntos de venta, el tema es que se venden muchas entradas en negro. Los dirigentes no quieren controles, porque ellos mismos serían controlados. Si los propios boleteros, hacen entradas duplicadas para quedarse con la plata, ¿te imaginás qué negocios puede hacer un dirigente?"

"Propusimos, aún después de perder, un proyecto que elaboró Poder Ciudadano y Transparency International, para que las cuentas de los clubes sean publicadas en Internet. En San Lorenzo lo cajonearon. Argumentan que no quieren permitir que los controlen. Pero si no hago nada malo, ¿qué problema hay?", se preguntó.

Finalmente, Monner Sans denunció que "hay un montón de gente que vive del sistema".

" ¿De qué viven los dirigentes del fútbol? Hay plata que no está rendida en ningún lado. Hay plata en negro. No hay que ensuciar de manera indiscriminada, pero hay dirigentes con un nivel de vida que no se condice con sus ingresos declarados", señaló.