Los pilotos cordobeses Marcos Ligato, Gabriel Pozzo y Sebastián Beltrán, sancionados en el Rally de Australia por anormalidades en sus autos, se defendieron hoy alegando que "no sabían nada" sobre la preparación de las máquinas.
En una conferencia de prensa llevada a cabo en los talleres del "Tango Rally Team", cuyo dueño es nada menos que David Nalbandian, Ligato se quejó de las acusaciones que plantearon que los pilotos debieron darse cuenta de los cambios en sus autos.
" Nos han tratado como delincuentes. No tenemos prontuario sino curriculum", señaló el piloto cordobés, quien aseguró que tanto él como sus compañeros no estaban enterados de los cambios realizados en los autos..
"Top Run, el equipo italiano que provee los motores, cometió un error, El contrato lo están viendo nuestros abogados porque el daño es muy grande. Aquí se ha jugado con la imagen de Córdoba, de Argentina, de nosotros y de David”, agregó Ligato, en alusión a Nalbandian, el dueño del equipo.
El domingo, los tres autos del equipo fueron excluidos del rally de Australia por modificaciones en el tamaño de las bridas de los motores de los autos de Ligato, Pozzo y Beltrán, lo que habría permitido dotar de mayor potencia al turbo.
Además de excluirlos de la competencia, la World Rally Car (WRC) dispuso la quita total de puntos del campeonato mundial y la imposibilidad de participar por el resto de la temporada.