Difícil de explicar, pero real. El seleccionado argentino de fútbol Sub 17 se quedó afuera del Mundial de Nigeria en los octavos de final al perder 3-2 con su par de Colombia, luego de ir ganando 2-0.
Iban 17' del primer tiempo cuando el equipo dirigido por José Luis Brown se puso en ventaja en el marcador. El juvenil central de River Leandro González Pirez recuperó la pelota en mitad de campo y fue para adelante. La pisó ante la salida de un defensor, y de zurda, la clavó abajo, junto al palo izquierdo del arquero colombiano.
La segunda alegría argentina llegaría en el segundo tiempo. A los 12' del complemento apareció una de las joyitas del equipo de Brown: el delantero de Boca Sergio Araujo. Tras una apilada de dos hombres, remató desde afuera del área y la colocó abajo junto al palo derecho del arquero colombiano.
Todo era festejo en el conjunto argentino pero no duraría mucho. Colombia no se dio por vencida y fue en busca de un resultado heróico. A puro ataque convirtió al arquerito de Independiente Martínez en una de las figuras del equipo nacional.
El muro argentino no duraría mucho. A los 18' Jeison Murillo puso el 1-2 luego de un corner y el partido dio un giro impensado. Colombia tuvo varias chances para lograr el empate, entre ellas un penal que se estrelló en el palo pero que en la jugada previa dejó a la Argentina con un hombre menos.
A dos minutos del final el equipo cafetero se encontró con la tan ansiada igualdad gracias a un gol de Jean Blanco. Sin embargo fue por más y lo logró. En tiempo cumplido, Héctor Quiñones, que había entrado unos minutos antes puso el 3-2 final para terminar con el sueño argentino de llegar a los cuartos de final del Mundial.
