Aerolíneas Argentinas empieza el martes las reuniones con los gremios para renegociar “usos y costumbres” con los gremios, en la búsqueda de un ahorro de US$ 15 millones por año en esta primera etapa pero que forma parte de un plan mayor de US$ 70 millones. El debut iba a ser con la Asociación de Aeronavegantes, que dirige Juan Pablo Brey pero se postergó al miércoles.
“Tenemos que mejorar la competitividad si queremos que la empresa crezca”, indican desde la línea aérea, en la antesala de que empiecen a jugar en el mercado local competidoras como Norwegian o JetSmart, con mayor estructura y espalda financiera que Flybondi. La low- cost de aviones amarillos que opera desde Palomar, pese a sus problemas de puntualidad y cancelaciones, ya le restó siete puntos de mercado a Aerolíneas, como publicó PERFIL.
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Después de un primer semestre en alza, hoy Aerolíneas está estancada. Y tiene que definir en 90 días el recambio de dos aeronaves. En un contexto de suba de tasas, el plazo sirve para presionar a los gremios: si no se consigue ese ahorro, tendrán que bajar una ruta internacional como Roma o Nueva York. Aerolíneas ya dio de baja la ruta a Barcelona el año pasado.
La empresa, que opera bajo el régimen de las estatales a las que se acordó ajustar en el programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), busca renegociar 70 puntos con los gremios, pero por ahora bajó la lista a 15 temas centrales y poco conflictivos. En ese marco, a poco de que se ponga en marcha el debate por el Presupuesto 2019, en la línea de bandera ya anticipan que será ajustado por la caída de la actividad general.
Las reuniones seguirán desde el martes, cuando se reúna con los pilotos de Pablo Biró y los aeronáuticos de Ricardo Cirielli. Ayer se enviaron las cartas a los trabajadores encuadrados en los seis gremios, una formalidad después de la reunión de esta semana con el nuevo titular de Aerolíneas, Luis Malvido, un ex Telefónica responsable de la reestructuración de la compañía española en Venezuela.
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Cada punto de los que se negocian podrían generar un ahorro de entre US$ 1 y 1,5 millones e incluyen temas como que la tripulación internacional pueda hacer vuelos locales y viceversa, o viajar con ocho tripulantes y no nueve (por si uno se enferma) al exterior y reemplazarlo por guardias.
A los pilotos se les bajó una noche de posta (de dos a una, durante el verano) en los vuelos al aeropuerto de JFK, en Nueva York. También se propondrá bajar de las tres noches de descanso en Roma. “Alitalia vuela a Buenos Aires y solo tienen una noche”, dicen desde Aeroparque.
