ECONOMIA
TENSION POR LA DEUDA

Alberto F relegaría al FMI y primero negociaría con los acreedores privados

El equipo del Frente de Todos prepara una “discusión dura” con el organismo multilateral, al que culparán por la crisis actual. Inversores ofrecen arreglo rápido y demorar al Fondo.

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Chispas. Fernández con los enviados del FMI, antes de acusarlos de corresponsables de la crisis. | cedoc

Falta cada vez menos para que el flamante presidente electo tome posesión del cargo y ya asoma una definición estratégica en el orden de prioridades que tendrán sus equipos técnicos: habrá rudeza en la negociación con el Fondo Monetario Internacional, se tensará la cuerda al máximo en la discusión y recién se buscará acordar con el organismo una vez que se haya cerrado la discusión con los acreedores privados. Así surge al menos de las visiones que PERFIL pudo recoger entre algunos de los asesores clave del entorno de Alberto Fernández, un político marcado por la crudeza de la negociación de la deuda en 2003, cuando conoció también los efectos positivos en términos de construcción política interna que puede tener un enfrentamiento con una contraparte del exterior.

La administración entrante se enfrenta al desafío de estabilizar la economía, contener la inflación, moderar los saltos del dólar y conseguir que la producción y el consumo vuelvan a crecer, todo con dos grandes acreedores que esperan saber cómo y cuándo cobrarán sus deudas: el FMI, que le prestó al gobierno de Mauricio Macri US$ 57 mil millones de dólares; y los acreedores privados, con quienes solo en el primer semestre hay vencimientos por US$ 22.500 millones para pagar. En definitiva, con dos auditores que definirán si volverá o no el crédito para el Gobierno y las empresas argentinas y si habrá solvencia para cubrir necesidades fiscales y evitar corridas.

“La primera definición es de qué modelo político se quiere. Si se quiere un modelo popular que no sea rehén de los mercados financieros, hay que plantearse qué hacer con el Fondo Monetario Internacional; yo le diría que ese desembolso que me debés no lo quiero”. La expresión no pasó inadvertida en los mercados financieros. La hizo esta semana en la AM 530 el economista argentino Martín Guzmán, discípulo de Joseph Stiglitz y estudioso de los temas de deuda, de diálogo habitual con los economistas que asesoran a Fernández, y también con llegada al gobernador de Tucumán y ladero clave del futuro jefe de Estado, Juan Manzur.

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Es muy probable que se deje al Fondo a la espera y se negocie rápido con los acreedores privados, dice un financista de relieve

Hay que ir muy duros con el Fondo y discutir muy fuerte”, suele decir Matías Kulfas, uno de los ministeriables que llevan la voz de Alberto por los eventos empresariales y financieros.  La presencia de Guzmán en esa mesa de negociación contribuiría a esa fortaleza. “Es muy probable que se deje al Fondo a la espera y se negocie rápido con los acreedores privados”, dice otro financista de relieve, de larga trayectoria con el compañero de fórmula de Cristina Kirchner.

Ocurre además que varios grandes bancos y fondos de inversión le acercaron justamente al Frente de Todos propuestas con ese eje: arreglos rápidos con los bonistas del sector privado para que una vez cerrado ese asunto el Gobierno cierre el acuerdo con el Fondo.

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Hoy prima la idea de tensar con el Fondo e ir primero con los acreedores privados”, añade otro ladero de Fernández, que aún no definió quiénes serán los que encabecen el Ministerio de Economía. Tal vez porque crece esa idea en la última semana hayan llegado dos mensajes desde la Casa Blanca: el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, “pidió cumplir los compromisos”  y ayer el presidente Donald Trump habló con Fernández también sobre el FMI. “Habrá que tener negociaciones paralelas pero buscar un acuerdo rápido, porque no hay mucho margen”, añade el economista.

Acá es donde toman el ejemplo de la deuda uruguaya en 2003. En ese caso, hubo chispas entre el gobierno oriental y el Fondo, que quería primero dar el visto bueno al programa económico para validar la negociación. En el espacio, en tanto, hay quienes miran con dudas este plan. Por ejemplo el consultor Emmanuel Alvarez Agis, que consideran que hará falta un desembolso veloz del organismo para fortalecer las reservas y evitar nuevas corridas.