La recuperación de la actividad en la pospandemia tiene que tener en cuenta la perspectiva de género: cómo volver a la actividad laboral, qué herramientas hay que tener en cuenta para la economía del cuidado y cómo aprovechar el ‘barajar y dar de nuevo’ que genera el aislamiento contra el coronavirus para aprovechar y cerrar brechas.
Los ejes formaron parte del primer encuentro del ciclo de diversidad de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (AmCham), moderado por María Amelia Videla, directora de Comunicación, Sustentabilidad y Asuntos Corporativos de ManpowerGroup Argentina, donde se recordó que solo 6 de cada 10 mujeres están activas en el mercado laboral contra 8 de 10 varones.
“Las brechas están presentes desde antes de la pandemia. Se mantiene así durante los últimos 20 años. Si bien se plantea de modo binario (mujer/hombre), en el caso de las personas trans están en su mayoría excluidas del mercado laboral”, remarcó Gala Díaz Langou, directora del Programa de Protección Social del think tank Cippec.
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La pandemia amplifica las desigualdades previas. “En el mercado de trabajo, las mujeres están más representadas en trabajos esenciales y están más expuestas al virus”, agregó Díaz Langou. También sufren más tensión en el hogar por la suspensión de las clases cuando son madres. “Se acentúan las desigualdades porque en los puestos más calificados, que pueden realizarse por teletrabajo, predominan los varones”, remarcó.
Desde ONU Mujeres, la titular del programa Ganar-Ganar para el sector privado, Verónica Bacarat, apuntó al impacto en las pymes, “que es donde están las mujeres”. En la videoconferencia participaban directivas de las principales empresas del país. En ese marco, la especialista en sector privado remarcó que las compañías “tienen que identificar a quién tiene cargas extra y revisar los objetivos de trabajo. Pensar en quién puede teletrabajar, respetar el salario, las licencias. Y fomentar la corresponsabilidad, para no poner toda la carga del cuidado sobre las mujeres. La empresa puede apoyar reconociendo que el trabajo doméstico lo están haciendo las mujeres y fomentar que lo hagan los hombres”, recomendó.
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Desde el Gobierno porteño, Marisa Miodosky, líder de Estrategia de Igualdad de Género, anticipó que se prevé el lanzamiento de un servicio de orientación de cuidados para las familias a través del chatbot de la ciudad. Y están preparando créditos blandos para los jardines maternales para la vuelta a la pandemia.
Según Díaz Langou, “todavía hay pocos datos pero las estimaciones del impacto de la crisis muestran que va a ser mayor en las mujeres. Son las primeras en salir del mercado laboral y las últimas en volver”. En ese marco, recordó un trabajo de Cippec que plantea que un sistema de cuidado puede generar un millón de puestos de trabajo y garantizar cuidado para los menores de 3 años. “Se está llegando al final del boom demográfico en 2040 y en ese momento se van a necesitar personas económicamente activas. Es una cuestión estratégica”, advirtió.
El evento se realizó en sintonía con el 3J, el quinto aniversario del #NiUnaMenos contra la violencia de género. Bacarat remarcó que “el sector privado puede colaborar informando qué es violencia, conociendo qué les pasa a las colaboradoras en la casa, formando redes entre el personal”.
