En una jornada convulsionada en la que el dólar superó la barrera de los 30 pesos y cerró a $30,68, Luis Caputo, presidente del Banco Central, buscó salir a frenar la corrida con todas las herramientas a su disposición, en especial las reservas.
"Mañana licitaremos US$ 500 millones y pasado, si lo demandan, otros US$ 500 millones, o US$ 700 millones", afirmó el funcionario esta tarde en un encuentro con periodistas, al comunicar las medidas para frenar la escalada del dólar. Entre los puntos anunciados, Caputo defendió la decisión de ir eliminando gradualmente el stock de Lebacs.
El objetivo, dijo, es que para fin de año no haya más Lebac en el mercado."¿Para qué dilatar algo que el mercado ya estaba esperando? Terminar con las Lebac es un paradigma, es un cambio fundamental en el sistema financiero", aseguró.
En relación al stock de letras que no están en manos de los bancos, el presidente del BCRA expresó que representa unos $500.000 millones, de los cuales unos $100.000 millones están en manos del sector público. El resto se divide en fondos comunes de inversión, empresas, minoristas y no residentes.
"La idea es darle las mismas oportunidades a todos, no sólo al tenedor de Lebacs. El que quiere comprar dólares tendrá las licitaciones, y no sólo mañana. Mañana licitaremos US$ 500 millones, y pasado, si lo demandan, otros US$ 500 millones, o US$ 700 millones", sostuvo el titular del BCRA, según consignó la agencia Noticias Argentinas.
El Ministerio de Hacienda suspendió la subasta diaria de dólares
"El esquema de cancelación de las Lebac está pensando para no afectar decisiones de inversión pasadas. Los bancos podrán tomar Letras de Liquidez (Leliq) o Notas del Banco Central (Nobac) a un año o más y mantener la relación", señaló.
Sobre el resto de los inversores, explicó que "deberán buscar alternativas: les daremos la opción de pasar a dólares o podrán suscribir Letras del Tesoro (Letes) en pesos o migrar a plazos fijos, si quieren mantenerse en pesos".
El aval del FMI. El jefe del BCRA dijo contar con el aval del FMI para usar reservas en intervenir sobre la plaza cambiaria aunque reiteró que eso solo se hará "cuando haya movimientos disruptivos de mercado" o cuando sea necesario para evitar "saltos en los agregados monetarios", en relación a los pesos que quedarán liberados a plaza en las próximas licitaciones de Lebac hasta fin de año.
"Tenemos aval del FMI para cancelar Lebac con reservas. Saben que, al hacerlo, estamos teniendo además ganancias importantes, porque, de última, vendemos a $30 lo que compramos a $15 o $16. La subasta de mañana está relacionada con eso", manifestó Luis Caputo.
Caputo aseguró que el FMI coincide con el Gobierno respecto de que “la deuda causó problemas y que el pago de sus intereses es la fuente del único factor de expansión monetaria que queda".
La creencia del Gobierno es que terminar con las Lebac en manos de privados y entidades no-bancarias “permitirá ganar eficacia en el manejo de la política monetaria”. “Hay instrumentos que se habían vuelto estériles para la lucha contra la inflación por las distorsiones que genera tener una deuda en pesos con capacidad de expandir en forma dramáticas los agregados monetarios", declaró Caputo.
El presidente del BCRA dijo que "si hay algo que no tiene sentido es permitirle a cualquier persona mantener una cuenta remunerada en el Banco Central. Nuestra relación tiene que ser con los bancos. Para nosotros es clave terminar con las Lebac. Nos facilitará mucho no solo la ejecución de política monetaria sino también la efectividad en el control de la inflación".
En relación a cómo intervendrá el Gobierno, el jefe de la entidad explicó que "será a través de licitaciones, como ya hicimos y hacen otros bancos centrales y no el de intervenciones esporádicas decididas desde la mesa de dinero: la idea es dar transparencia al mercado”, detalló.
La política monetaria, en palabras del funcionario, "fue y es la de flotación cambiaria”. “En circunstancias como las de estos días muestra que es muy útil para evitar impacto pleno de shock externos. Pero actuaremos de ser necesario para evitar volatilidades porque necesitamos recuperar estabilidad financiera", dijo.
Riesgo país. Una de las razones que impulsó la tasa de riesgo país, según declaró Caputo, se debe a “las lecturas erróneas que se hicieron del acuerdo con el FMI”. “Se tomó como meta un objetivo que se había propuesto el propio Gobierno, que era el de sanear el balance del BCRA recomprándoles las Letras Intransferibles", comentó,
Al respecto, explicó que eso generaba “que los analistas crean que a las necesidades netas de financiamiento por US$ 8.000 millones para 2019 había que sumar los US$ 15.000 millones que se pensaban comprar de estas letras”, manfiestó, y agregó: “ Por eso suspendimos este programa, que se aplicará cuando el Gobierno recupere acceso al financiamiento en condiciones que lo justifiquen".