El empresario Enrique Pescarmona anunció un acuerdo para comprar el negocio de generación de energía hidroeléctrica del gigante global General Electric, con lo cual se transformará en la tercera compañía mundial del sector.
Los términos económicos de la operación no fueron revelados, pero sí Pescarmona adelantó que no utilizará fondos de la compañía para la transacción. "El Grupo Pescarmona continúa con todas sus actividades y adquiere potencia en el mercado de bienes de capital", dijo el empresario mendocino.
El martes, el empresario se había entrevistado con el presidente Néstor Kirchner para adelantarle la compra. "El presidente estaba muy contento. Me dijo: 'Este es el tipo de empresarios que necesita el país'", relató en una conferencia que se realizó en simultáneo con Atlanta (Estados Unidos), Mendoza y Buenos Aires.
General Electric Energy, de quien depende la unidad de negocios que comprará Pescarmona, es parte de General Electric, una compañía con actividades en tecnología, medios, servicios financieros, que construye motores de aviación, gerneración de energía, tecnología de agua, diagnósticos por imagen, tiene negocios financieros, opera contenidos de televisión, entre otros segmentos.
A la vez, el Pescarmona Group of Companies (PGC) se define como un grupo multinacional privado, en negocios de generación y equipamiento para energía hidroeléctrica y eólica, sistemas portuarios, autopartes, sistemas de control, serviicos ambientales y seguros. Emplea a más de 6.000 personas y opera en 27 países. El principal accionista del grupo de emrpesas es la familia Pescarmona. La operación será encabezada por Jairo Projects, 100% de la familia Pescarmona.
"La operación, cuando se concrete, nos va a permitir entrar en mercados que hoy tenemos prohibidos, como los Estados Unidos, Canadá, Europa o en China mismo, donde GE tiene una planta", agregó. La división de generación hidroeléctrica también tiene tres plantas en Canada, una en Finalndia y una asociación en Brasil.
El acuerdo contempla un fuerte desarrollo en proyectos de generación eólica. "En la Argentina no tenemos ningún proyecto hidroeléctrico en este momento. Ojalá lo tuviéramos, pero todo lo que hacemos lo exportamos", dijo Pescarmona. "Esta operación es muy buena para la Argentina, es una buena noticia, porque se revierte la tendencia", dijo, en referencia a la extranjerización de la industria argentina.
En rigor, lo que se continúa es la tendencia a las inversiones fuera del país de empresas de capitales originalmente nacionales, altamente especializadas. Así como antes fue el modelo de Techint, altamente especializado y eficiente en la fabricación de tubos sin costura para la industria petrolera, ahora Pescarmona aspira a compartir un liderazgo internacional.
En la arena mundial, la fabricación de turbinas es un negocio donde mandan, en primer lugar, la francesa Alstom, y luego una sociedad de Siemens con Voight. "Dado que IMPSA (Industrias Metalúrgicas Pescarmona) y el negocio hidroeléctrico de GE Energy tienen modelos operativos y tecnológicos complementarios, cooperarán entre sí para atender mejor a los clientes en todos los grandes mercados del mundo", dijo Pescarmona. GE Energy emplea a 2.000 personas en una docena de locaciones.
