Mientras una parte de la prensa del espectáculo estadounidense comenta el reciente aumento de peso de la cantante y actriz Jessica Simspon, la otra mitad está preocupada por la impresionante pérdida de kilos que muestra otra actriz, Lindsay Lohan.
La chica de 22 años, que antes lucía una figura bastante saludable, hoy está piel y huesos, y los comentarios de los periodistas y del ámbito hollywoodense no se hicieron esperar. Su última aparición en un lanzamiento del diseñador Matthew Williamson desató una ola de rumores sobre su peso.
Lindsay se vio obligada a salir a responder. "Como", dijo, y agregó: "Ayer comí un Big Mac en McDonald's. Como tanto como siempre he comido", completó. Sin embargo, reconoció que había bajado algunos kilos, aunque no pudo especificar cuántos. "Nunca me pesé en la vida", contó a la revista estadounidense US Magazine.
La actriz de Mean Girls (Chicas Malas) culpó al estrés "y a la falta de sueño cuando viajo", por su figura. "Estuve trabajando mucho, y creo que todo junto se suma", explicó. También dijo que ahora que perdió peso ya no siente la presión de Hollywood para estar flaca. Es que Lohan ya había sufrido críticas, tanto por aumentar kilos como por bajarlos.
"Ya dijeron todo lo que se podía decir de mí, y nunca me importó. Soy mi propia persona y la gente puede decir lo que quiera. Aún así voy a seguir siendo la persona que soy", concluyó.