ESPECTACULOS
SHUMI GAUTO

Relatos clásicos con personalidad y con cariño

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Autora. Shumi Gauto: actriz, locutora, conductora, productora y cuentacuentos. Se altera el formato típico del cuento leído en neutro. | GZA. apen / pamela brunfman

"No estamos acostumbrados a que los relatos clásicos describan el mundo de hoy”, dice Shumi Gauto, la conductora de radio y actriz. Es cierto. Cualquier niño o padre sabe que a la hora de escuchar un cuento en el mundo de los podcast hay pocas opciones con personalidad. Descubran entonces en YouTube, Spotify o Instagram Cuentos feroces, el proyecto de Gauto junto con su pareja Joaquín Bachrach y Rodrigo Menéndez. La base es simple pero encantadora y elaborada: reescribir los cuentos infantiles y mutarlos en, como dice Gauto, “algo que habla del mundo de hoy”. Así aparecen entonces relatos como Blanquita Nieves, Caperuzota, Cenigenia y Chica sirena. 

—¿Los “Cuentos feroces” nacen como una reacción? 

—Más que reacción, nacen como necesidad. La mayoría de los podcasts de cuentos disponibles hablan en español castizo o neutro, o en un tono demasiado infantil, casi apuntando a los bebés. Había pocas opciones para chicos un poco más grandes. De hecho, nos llegan muchos mensajes de padres y adultos  que ¡escuchan los cuentos antes de irse a dormir!

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—¿Cómo definen su versión de los cuentos?

—Creo que hacemos versiones modernas, dinámicas y actuales, y que constantemente intentamos introducir guiños a los chicos, para que sientan que alguien les habla en su mismo idioma. La edición es clave en este punto. A través del sonido generamos el mundo de cada cuento. 

—¿Qué podemos esperar de esta experiencia?

—Principalmente vincularnos armónicamente con realidades diferentes. Integrarlas y aceptarlas con naturalidad. Ese es nuestro propósito: contar cuentos en los que todos puedan sentirse identificados, y no solo unos pocos. Además, los chicos se van a encontrar con una actividad puramente auditiva y, con ella, la oportunidad para dejar las pantallas de lado unos momentos y poner a volar su imaginación.