Un bebé murió luego de que le explotara un fuego artificial en la cara en medio de los festejos por una celebración católica. El terrible hecho ocurrió en Nicaragua, en medio de los festejos por la Inmaculada Concepción de la Virgen, el domingo 1 de diciembre.
Todo comenzó cuando una familia de la zona rural de Matiguás, departamento de Matagalpa y ubicada al norte del país, celebraba esta fecha en la cual es habitual que se utilice pirotecnia. Uno de los cohetes impactó contra la cabeza del bebé de 5 meses y quien se encontraba en brazos de su madre, una joven de 18 años. Inmediatamente llamaron a una ambulancia y el menor fue trasladado de urgencia a un hospital cercano. Sin embargo, los médicos que lo asistieron no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
Personal policial declaró a la prensa local que el cohete se desvió en el trayecto y cayó sobre la cabeza del bebé, donde explotó. La encargada de dar a conocer la información fue la ministra asesora de la Presidencia para temas de salud de ese país, Sonia Castro. La funcionaria contó además que hubo una importante cantidad de heridos. “La festividad de la Inmaculada Concepción dejó además otros 19 lesionados por manipular pólvora, 13 de ellos menores de edad”, precisó según consignó el portal de noticias Yucatan.com.mx.
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En ese marco la mujer detalló: "Los artefactos con los que más se están lesionando los menores son los llamados triquitraques, bombas caseras, cola de ratón, bengalas y cohetes artesanales". Ante este escenario trágico, y la cercanía de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, la ministra pidió que las personas que manipulen este tipo de objetos lo hagan "con responsabilidad", para evitar que personas resulten heridas.
Los heridos mencionados por Castro son todos niños a quienes les estallaron bombas de fabricación artesanal en sus manos y perdieron parte de sus dedos. Cuatro de ellos permanecen hospitalizados en observación.
Investigación. A raíz de este hecho, se inició una investigación judicial y se logró detener a dos personas que lanzaron fuegos artificiales. Ahora las autoridades intentan determinar qué responsabilidad tuvieron en la muerte del bebé.
F.D.S./F.F.
